La voz del expresidente César Gaviria fue clave para el revés que hoy sufre la reforma tributaria. Tras las críticas del líder del Partido Liberal al proyecto que llevó el Gobierno Petro al Congreso surgieron múltiples reparos y dudas sobre la iniciativa, ya no solo por parte del liberalismo sino de los otros partidos tradicionales. Hoy, si ese escenario se mantiene, es una incógnita la votación del proyecto en el pleno del legislativo. Si bien la bancada oficialista es mayoría, la “aplanadora” que se preveía hace unos meses dependía de la alianza de alternativos y tradicionales que, por lo menos en lo que respecta a la tributaria, se rompió.

Gaviria y varios parlamentarios liberales, y luego congresistas de otros partidos, plantearon dudas sobre la iniciativa del Gobierno que busca un recaudo de $22 billones para financiar sus promesas de campaña. Para discutir los reparos, los senadores y representantes a la Cámara del trapo rojo se reunieron este miércoles en el centro de Bogotá, donde definieron sus líneas rojas y pasos a seguir en el trámite de la reforma. No obstante, dentro del partido hay varias voces que no se explican la posición del expresidente Gaviria, al que incluso señalan de “estar dividiendo”.

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En el encuentro, liderado por supuesto por Gaviria, se compartió un documento que elaboró el expresidente donde se anotan sus preocupaciones sobre el proyecto, como los impuestos a alimentos ultraprocesados, a las pensiones e hidrocarburos, la tributación de las personas naturales, el pago de regalías, el impuesto de renta para las zonas francas, impuestos a las pensiones, al patrimonio, el ICA y el 4 x 1.000, entre otros.

Los parlamentarios del partido comentaron también sus preocupaciones y fijaron sus posturas sobre la tributaria, y como conclusión del encuentro se acordó la creación de una subcomisión, que estará liderada por los coordinadores ponentes de la reforma tributaria en Cámara y Senado. Ellos, según comentó el representante Carlos Ardila al finalizar la reunión, “tienen como tarea recoger todas las preocupaciones que hoy se han planteado en esta sesión, para presentar un informe el lunes”.

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El representante dijo también que el espacio sirvió para escuchar todas las preocupaciones de los congresistas y plantear “puntos que resultan preocupantes para diferentes regiones”. Uno de los temas en los que coinciden la mayoría de liberales es el impuesto a las pensiones y los alimentos. También se habló que la iniciativa “no puede desconocer lo que ocurre en el mundo y lo que ocurre en el país”, en referencia a la tributación al sector de hidrocarburos.

“Se está hablando de una recesión y no está no podemos terminar gravando a tal punto que terminemos ocasionando un daño al aparato productivo de este país”, manifestó el representante, mientras que el senador Alejandro Carlos Chacón destacó que “el partido no puede ser defensor de ricos que no aporten al país” y señaló que el estudio a la reforma se basará en la defensa de las clases media y baja.

En esa revisión, dijo Chacón, se marcarán los puntos que le pedirán modificar al Gobierno “o, si no, no acompañaremos la tributaria”. El senador también aseguró que pedirán que permitan que la votación no se haga en bloque para discutir punto por punto las preocupaciones. “Que no suceda lo que pasó en las económicas, donde la votación fue en bloque y no permitió dar una discusión por ejemplo de las pensiones. Usted puede echar un discurso, pero si le meten en bloque 100 artículos y no le separan el artículo a discutir no puede tener la oportunidad de diferenciar una cosa con la otra”, destacó.

En medio de la aparente cohesión del partido, otros sectores del liberalismo se mostraron sorprendidos por la postura que ha tenido Gaviria sobre la reforma. “Nos divide, llega con un discurso diferente al que había propuesto”, expresaron los parlamentarios que pidieron reservar sus nombres, al considerar que desde el partido hay bastante hostilidad con la reforma, a pesar de que en el proceso de socialización se lograron “algunas victorias”.

Desde dicho sector comentaron también que buena parte de la bancada está “incómoda” con esta postura, casi de oposición sobre la reforma, teniendo en cuenta que son parte de la bancada de gobierno. “Salió desbaratar la reforma, quedamos atónitos y sorprendidos. Nos llevó casi a votar la reforma en contra y dice que no hay nada bueno”, expresaron los congresistas sobre la postura, según ellos, sorprendente de Gaviria.