En el primer día de gobierno de Gustavo Petro, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, presentó al Congreso el proyecto de ley de reforma tributaria con la que la nueva Administración aspira a recaudar dinero suficiente para reducir la deuda social.

Esta iniciativa nace con la intensión de lograr un mayor recaudo de impuestos a personas naturales, la reducción de beneficios fiscales a empresas, la tributación a las bebidas azucaradas, a la exportación de petróleo, carbón y oro cuando superen cierto techo, y en una lucha frontal contra la elusión y la evasión.

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Sin embargo, uno de los puntos que más ha dado de qué hablar tiene que ver con la posible aplicación de nuevos impuestos a varios alimentos.

“Este proyecto de ley propone la creación de un impuesto al consumo de la producción para su posterior venta e importación de alimentos ultraprocesados y con alto contenido de azúcares añadidos, considerando los potenciales efectos en la salud de los colombianos derivados del consumo de estos productos”, se lee en la reforma.

En el documento también justifican que varios alimentos sean gravados en dicha reforma porque están nutricionalmente desequilibrados.

“Tienen un elevado contenido en azúcares libres, grasa total, grasas saturadas y sodio, y un bajo contenido en proteína, fibra alimentaria, minerales y vitaminas, en comparación con los productos, platos y comidas sin procesar o mínimamente procesados”, se señala en la exposición de motivos del proyecto.

Lista de alimentos que podrían subir de precio con la reforma tributaria

Tomando en cuenta lo anterior, los expertos ya especulan cuáles son esos alimentos que pueden subir su precio una vez se aprueba la reforma, y ellos son:

  • Carne y comestibles salados, secos o ahumados; harina y polvo comestible de carne.
  • Embutidos y productos similares de carne.
  • Preparaciones y conservas de carne o sangre.
  • Papas fritas.
  • Patacones.
  • Chicharrones empacados.
  • Snacks o pasabocas empacados.
  • Galletas con adición de edulcorante.
  • Barquillas y obleas, incluso rellenos y waffles.
  • Ponqués y tortas.
  • Bizcochos y pasteles de dulce.
  • Merengues.
  • Cacao en polvo con adición de azúcar y edulcorante.
  • Confites de chocolate.
  • Frutas recubiertas de chocolate y/u otros productos de confitería y repostería.
  • Artículos de confitería sin cacao.
  • Helados, incluso con cacao.
  • Postres a base de leche, incluido el arequipe.
  • Manjar blanco o dulce de leche.
  • Salsas y sopas.
  • Cereales.

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