La regulación de esos cobros beneficia directamente a los estudiantes para quienes dichos costos aumentan en un 10% su deuda con la institución, indicó La FM.

El proyecto, puntualmente establece que “el Icetex asumirá los gastos en que incurra por concepto de la cobranza prejurídica de cartera de créditos educativos hasta el momento en que se notifique el auto admisorio de la demanda”, explica Congreso Visible.

Además, “el gasto pre jurídico de ninguna manera puede ser transferido al deudor o a sus herederos”.

El congresista Rodrigo Lara, autor de la iniciativa, agregó en la emisora que busca “que el Icetex, de forma autónoma, directa y sin intermediación, celebre acuerdos de pago que permitan la extinción de la obligación, la normalización, la refinanciación, o la puesta en marcha de planes o brigadas de normalización de cartera u otros, sin que los honorarios sobre recaudos estén a cargo del deudor”.

Anteriormente, “la ley no tenía especificado quién acarreaba con los costos de estos cobros; sino que se iban a la ley global, con lo cual cada estudiante asumía ese costo”, agregó la senadora Susana Correa, en Blu Radio.

La congresista explicó que “el Icetex tiene que ser de fomento social y no financiero, por lo cual, con la norma aprobada, hoy este cobro no se puede hacer hasta que esté recibida la demanda”.

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El medio agregó que el proyecto le da autonomía al Icetex para “quitar los créditos y los intereses, dependiendo de cada situación”, teniendo en cuenta que los beneficiarios de esos créditos, en su mayoría, son de estratos 1, 2 y 3 y no tienen recursos de más para pagar.

Esos cobros entraron en vigencia en el año 2013 y “se ha venido causando a través de firmas de cobradores externas, teniendo en cuenta que el Icetex no cuenta con la infraestructura para llevar a cabo los mismos”, agregó Lara en RCN Radio.

Con eso coincide Daniel Torres, representante de los usuarios del Icetex, que recordó que los estudiantes terminan pagando dos o tres veces el valor del crédito en solo intereses.

El joven agregó en Blu Radio:

“El Icetex venía entregándoles más de 85.000 millones de pesos en contratos a los ‘chepitos’ [a las casas de cobranza], y ellos se quedaban con ese dinero de nuestro bolsillo, de los deudores. Nosotros, los usuarios, cuando quedábamos en mora teníamos que pagar una mordida del 10 % sobre el valor que teníamos en deuda para poder evitar las llamadas hostigantes, reportes en las centrales de riesgos y los embargos. Esto [el proyecto] le pone un freno a eso”.

Al proyecto le falta la firma del Presidente para ser sancionado y entrar en vigencia.