“Se suspende el alza de los peajes en la vía al Llano”, anunció Zuluaga en su cuenta de Twitter, y explicó que sí habrá un alza, pero no antes de 4 meses.

El gobernante añadió que cuando se presente el alza, hacia mitad de año, el incremento ya no será del 10 % más el 1,61 % de Índice de Precios al Consumidor, IPC, del 2020, sino que será del 3 % más el IPC, es decir, menos de la mitad del incremento que originalmente estaba estipulado.

Para completar la buena noticias para los conductores, Zuluaga dijo que la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, se había comprometido a que en los años venideros esos tres peajes de la ruta Bogotá-Villavicencio no subirán más allá del 3 % más el IPC.

La discusión por el desproporcionado aumento que se tenía pensado

El gobernador Juan Guillermo Zuluaga había manifestado el jueves que los usuarios de esa ruta estaban preocupados frente al alza porque “fue un año durísimo para el bolsillo de todos por la pandemia”.

“Esperamos que el alza no se haga por encima de la inflación (en 2020 fue de 1,61 % y la ANI estima 8,5 % más inflación), porque sería un duro golpe y que encontremos caminos de solución”.

Por su parte, el presidente de la ANI, Manuel Gutiérrez, señaló el jueves que estaba de acuerdo en “encontrar un mecanismo para alivianar la situación” pues el alza está proyectada en cerca de un 10 % y por eso dijo entender las preocupaciones de los ciudadanos.

De otro lado, la molestia de los conductores radicaba en el poco uso que se le ha podido dar al corredor vial por los derrumbes y las cuarentenas, y además porque la nueva alza triplica el incremento del salario mínimo, que para 2021 fue de 3,5 %, mientras los peajes pretendían subir entre el 7,5 % y el 10 %, según las proyecciones, lo que habría quedado costando 8.400 pesos más por trayecto, para un total de 47.100 pesos.