El negocio de la ropa en Colombia cambió en este 2023 y, solo en los primeros meses, se ha sentido el incremento en los costos, sobre todo de las prendas que son importadas y que asumieron el incremento en los aranceles ordenado por el Gobierno.
Ante las alzas elevadas, un negocio que gana fuerza y que ya está entre las opciones de los colombianos a la hora de renovar el clóset es el de la ropa usada, que ya está en varias ciudades y que suma nuevos clientes. Según el diario La República, esta oferta de prendas ya se volvió una moda y, a nivel internacional, mueve millones de dólares.
De acuerdo con ese diario, las ventas de ropa usada en el mundo podrían llegar a 211.000 millones de dólares y, para 2024, una de cada 10 prendas que tiene una persona sería usada.
En el caso de Colombia, una de las ciudades más dinámicas en la venta de estas prendas es Medellín, en donde la compra y venta está a la orden del día. “Todas las personas que tienen un armario grande y con ropa increíble quieren abrir espacio revendiendo”, explicó Cristian Álvarez, comerciante que destaca que en esa industria se compra barato y se vende barato, cita ese mismo medio.
(Vea también: El ‘outlet’ ‘secreto’ del Éxito en Bogotá en donde se encuentra ropa casi regalada)
Ropa usada en Chapinero, Plaza España, Marly (Bogotá)
En el caso de Bogotá, aunque el negocio de ropa usada no es nuevo, la oferta y demanda aumentaron después de la pandemia. Según El Espectador, a comerciantes de sectores populares como la Plaza España y Marlí, en la capital, la ropa les llega desde el exterior y son muy buscados por los clientes.
“Nuestra temporada alta es de enero y febrero, cuando entran los niños a estudiar”, aseguró Luz Mery Ladino, comerciante de ropa usada, que asegura que, contrario a otros negocios, su mejor época no es en diciembre. En contraste, en el comienzo del año, sus ventas superan las 80 prendas diarias.
En el caso de Chapinero, otro de los lugares más famosos en el negocio de comprar y vender ropa de segunda mano, se destaca la limpieza como uno de los factores más importantes para tener el negocio, hacerlo sostenible y cuidar los clientes.
“Acá puede conseguir ropa Armani y Hugo Boss. La gente viene buscando marcas y mientras de más alta gama sea, mejor, porque una prenda de Armani puede estar en $2 millones y aquí la consigue a un precio económico. Se puede conseguir un blazer Hugo Boss entre $20.000 y $100.000”, sostuvo Ángela Villanueva, dueña de uno de los negocios en Chapinero.
LO ÚLTIMO
.svg)
