El índice histórico de 13,12 % en la inflación que alcanzó Colombia para su variación anual de 2022, de acuerdo con el pronunciamiento del Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, fue jalonado principalmente por la escalada de precios que sufrieron los alimentos a lo largo del año.

La división de alimentos y bebidas no alcohólicas presentó un incremento de 27,81 % a nivel nacional; sin embargo, para Ibagué este registro fue aún mayor, llegando al 31,31 %, 3,5 puntos porcentuales (p.p.) por arriba de la media, posicionando a la ciudad como la segunda del país con el mayor aumento en el precio de los alimentos.

(Lea también: Alternativa para que no le suban tanto el precio del arriendo, pese a dato de la inflación)

Esto, sin lugar a dudas, incide en gran medida sobre las finanzas de los hogares del país. Y para el caso concreto de la capital tolimense, según las estimaciones del Observatorio de Empleo del Tolima, los hogares ibaguereños más pobres, tienden a gastar entre un 60 % y 70 % de sus ingresos en alimentación, máxime, cuando algunos de sus miembros reciben parte de sus comidas diarias por fuera de casa.

El almuerzo ejecutivo o popular corrientazo se ha convertido a lo largo de los años como una solución efectiva para suplir las necesidades de las personas, en su gran mayoría trabajadores, a quienes les resulta mucho más práctico alimentarse en restaurantes cerca a los lugares que frecuenta que desplazarse hasta sus viviendas.

No obstante, con el aumento del Índice de Precios al Consumidor (IPC), algunos de los productos básicos que componen los almuerzos, han empujado de igual manera al incremento de las comidas preparadas por fuera del hogar para consumo inmediato, registrando una variación anual en el país de 21,40 %.

Ibagué fue una de las ciudades colombianas en donde más se pudo evidenciar estas subidas, ya que una de las subclases que más subió en sus precios fue la de los almuerzos, esto, como consecuencia de las grandes variaciones que se dieron en los precios del arroz, carnes y verduras, productos muy comunes en un ‘corrientazo’.

Argeny Gutiérrez, propietaria del restaurante Tolipaisa, ubicado en el barrio Galarza, en el sur de la ciudad, señaló que el reajuste de los precios para los corrientazos es algo que va a pasar indudablemente, la razón principal, el incremento en el costo de los alimentos.

(Vea también: Corrientazo sube más que la inflación en Colombia y ya vale $ 15.000 en promedio)

Gutiérrez sostuvo que los insumos que más se utilizan para la elaboración de sus comidas han demostrado unas subidas escandalosas durante este último año, algo que continuó para las primeras semanas del 2023. Ella puso como ejemplo al arroz, uno de los productos base para la elaboración de su menú, en poco más de un año ha duplicado su precio.

Otros de los productos a los que Gutiérrez hace referencia son: las cebollas, tanto larga como cabezona, de las que aseguró que cada vez se encuentran más caras.

Asimismo la papa, cuyo bulto adquirió recientemente en $ 140.000, y el plátano, que compró en $ 60.000, y así continúa la lista.

“Uno le explica a los clientes el por qué debe cambiar los precios, siendo la razón principal, que todo está muy caro”, indicó Gutiérrez.

Lee También

Ella actualmente sostiene el precio de los desayunos y almuerzos entre los $ 10.000 y $ 12.000, sin embargo, por el tema de alzas, indicó que lo más probable es que el valor del ‘corrientazo’ suba entre $ 1.000 y $ 2.000.

En la zona de Ricaurte existen restaurantes donde vende un corrientazo completo en $ 8.000 y $ 9.000, así mismo, en la plaza de la 21, existe un local que los tiene a $ 7.000.