En un foro celebrado con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, subrayó la importancia de un cambio en el consumo como factor clave para lograr la transición energética.

(Lea también: Gobierno prepara golpe para algunos carros en Colombia y eliminaría beneficio grande)

En este sentido, Bonilla destacó el caso de la gasolina, que volvió a subir de precio este mes de junio, y planteó la meta de que todos los vehículos matriculados en el país sean eléctricos para el año 2040.

Estas declaraciones se producen en medio de un debate en el gabinete del Pacto Histórico sobre la reducción de las importaciones de combustibles, especialmente de gasolina, tema abordado por el presidente Gustavo Petro en un trino reciente.

Según las declaraciones del ministro Bonilla en una conversación con el diario El Tiempo, Colombia consume diariamente 12 millones de galones de combustible, de los cuales 6,4 millones corresponden a gasolina corriente y 5,7 millones a diésel, que durante este 2023 no subirá de precio.

Para cerrar la brecha en el consumo de gasolina corriente, se han implementado incrementos mensuales graduales en su precio, siendo los dos últimos ajustes de 600 pesos. Siguiendo este ritmo y considerando la disminución del precio del petróleo, se estima que esta brecha podría cerrarse en aproximadamente cuatro o cinco meses.

El ministro Bonilla también resaltó que el 40 por ciento de la gasolina corriente consumida en Colombia es importada y que Ecopetrol, la empresa estatal de petróleo y gas, la adquiere en el mercado al día, en lugar de planificar sus compras mediante mecanismos de subasta y futuros que podrían obtener precios más favorables.

(Vea también: Taxistas anuncian paro por costos de la gasolina; Hugo Ospina se fue contra el Gobierno)

Esta situación se debe a que las refinerías del país no tienen la capacidad suficiente para producir toda la gasolina que se consume. Asimismo, se destaca que el incremento en el precio de la gasolina alimenta la inflación y que aumentar simultáneamente el precio del diésel agravaría aún más esta situación. El objetivo es mantener una tendencia a la baja en los precios de los combustibles.

La transición energética hacia una movilidad más sostenible y eficiente es un desafío global. En el caso de Colombia, el compromiso con la adopción de vehículos eléctricos y la reducción del consumo de gasolina se presenta como una oportunidad para disminuir la dependencia de los combustibles fósiles y mitigar los efectos del cambio climático. La promoción de alternativas energéticas limpias y el fomento de la investigación y desarrollo en este campo pueden contribuir a una economía más sostenible y generar nuevas oportunidades de empleo en sectores emergentes.