La reforma tributaria que el Gobierno Nacional radicó ante el Congreso de la República continúa acaparando críticas. Aunque el debate público se ha centrado en el impuesto a las bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, hay otros puntos que no han escapado de la polémica.
Entre esos artículos cuestionados destaca el que impone una mayor tributación (unificación de rentas líquidas gravables en una única tarifa y disminución de topes nominales de rentas exentas y deducciones) para quienes ganan más de 10 millones de pesos mensuales, que según el texto del proyecto, son el 3 % de los trabajadores en Colombia.
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Ante la posible medida se abrió el debate entre quienes consideran que una persona que gana más de 10 millones de pesos al mes hace parte de los ricos del país —a los que Petro dijo que les pondría más impuestos— y quienes señalan que el Gobierno le apunta a recoger dinero de la clase media.
Reforma tributaria: abogada critica proyecto
Es tal la controversia por el artículo que este domingo Viviana Vanegas, abogada tributarista, acudió a los micrófonos de Caracol Radio para exponer que un presupuesto de 10 millones de pesos apenas cubre las necesidades de una familia clase media. Aunque reconoció que quienes devengan esa cantidad de dinero son una pequeña fracción de la población, cree que no tienen mayores lujos y una carga tributaria adicional los golpearía.
La abogada indicó que una familia con un presupuesto de $ 17’000.000 tiene los siguientes gastos al mes: $ 2’800.000 en arriendo y administración, $ 4’600.000 en rutas, colegios y loncheras, $ 1’.000.000 en servicios, $ 2’500.000 en mercado, $ 2’040.000 en salud y pensión, $ 800.000 en medicina prepagada, $ 240.000 en internet y celulares, transporte $ 220.000, restaurantes $ 300.000, empleada del servicio $ 1.581.000 y $ 200.000 para clases de natación para los niños. Entre otra cosas, gastan poco más de 16’000.000.
En ese orden de ideas, explicó que pese a tener algunas comodidades, no tienen lujos extraordinarios y, además, generan empleo con su propio bolsillo. “Siendo objetivos, una familia con ingresos superiores a 10 millones de pesos lo que busca es satisfacer sus necesidades de la mejor forma. Claro, con muchas facilidades que otros no tienen. Pero en realidad nos cuestan y nacen de nuestro esfuerzo diario”.
Y agregó: “No tenemos grandes lujos. En el ejemplo, van una vez al mes, a la peluquería 3 veces al año. No tienen Lamborghini ni viajan cada mes. Tienen un solo carro y el resto de días se van en Transmilenio”.
La abogada complementó su explicación señalando que, en medio de la inflación y la alteración de la economía, quizá no es tan objetivo decir que quienes ganan más de 10 millones de pesos son millonarios.
“Enfrentar una mayor carga tributaria como la que posiblemente se pueda venir este año o el próximo puede ser bien impactante en materia económica”, concluyó.
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