El Raymond James Stadium de Tampa, Florida, fue el escenario para que Bad Bunny  (quien recientemente lanzó una línea de tenis con Adidas) cumpliera su sueño en la lucha libre profesional con una victoria que sorprendió a más de uno.

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Así lo reflejaron las redes sociales, donde los internautas no solo manifestaron su asombro al descubrir el talento del boricua en otro campo diferente a la música, sino que incluso expresaron respeto hacia el artista luego de la exhibición en la WWE con la que se lució en la noche del sábado ante 25 mil personas.

Con llaves, planchas y tornados, entre otros, el intérprete de música urbana demostró lo preparado que estaba para este combate, trucos en el cuadrilátero que no pasaron desapercibidos para los usuarios de Twitter, que le dedicaron varios memes.

Pero uno de los movimientos que, sin duda, se llevó todos los aplausos fue el ‘Canadian Distroyer’ que Bad Bunny ejecutó sobre John Randall Hennigan (‘John Morrison’) en los últimos minutos de la contienda y que algunos usuarios de redes sociales rebautizaron como “puertorican destroyer’, en honor al país de origen del músico.

Vale la pena recordar que el combate del reguetonero fue solo uno de los 7 que hicieron parte de la primera noche de la trigésimo séptima versión del evento de lucha libre más importante del año en Estados Unidos. La programación continuará este domingo con otras 7 peleas, cuyos protagonistas puede consultar aquí.

Estados Unidos critica a Petro en la ONU y evalúa si continúa apoyo a Colombia en el Acuerdo de Paz

Estados Unidos lanzó fuertes críticas al presidente Gustavo Petro durante la más reciente sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, en la que se presentó el informe trimestral sobre la paz en Colombia. El representante estadounidense, Mike Waltz, acusó al Gobierno de usar “retórica incendiaria” y de impulsar políticas que, según Washington, socavan los avances hacia una paz duradera. Además, cuestionó la ampliación del mandato de la Misión de Verificación, señalando que se ha desviado de su objetivo inicial —la desmovilización de las Farc— para centrarse en lo que calificó como “prioridades políticas excesivas”, como la JEP y el apoyo a minorías étnicas.