Una amarga derrota encajó el plantel de Independiente Medellín en su segunda salida en la fase de grupos de la Copa Libertadores 2023. Al ‘poderoso’, con un desempeño irregular en ataque, no le alcanzó para igualar frente a Nacional de Uruguay y cayó 2-1, por la segunda fecha del Grupo B.

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El tanto de cabeza del delantero argentino Luciano Pons (79′) no le alcanzó a los dirigidos por David González sumar frente a un contrincante directo en sus aspiraciones de clasificar a los octavos de final. Y conservar su invicto en la competición, que en el actual año se extendía a cinco fechas.

Cuando parecía recuperarse del golpe propinado a los 37′ por Gastón Pereira, que puso en aprietos al foráneo en el Parque Central, vino el nocaut: pues a los 90+6′ apareció el defensa central argentino Fabián Noguera, quien le frustró los planes al onceno antioqueño en esta visita.

Con solo un punto en dos presencias, el ‘Decano’ se estancó en el tablero de posiciones de su zona, en la que Inter de Brasil y el ‘bolso’ lideran con cuatro unidades. En su siguiente presentación, en la que estará obligado a ganar, el DIM recibirá el 3 de mayo (9:00 p.m.) a Metropolitanos de Vennezuela.

En la media distancia, ambos equipos tuvieron sus primeras apariciones. En especial el ‘bolso’, que por intermedio de Diego Zabala, a los 4′, intentó sorprender al arquero Luis Erney Vásquez. En el ‘poderoso’, en tanto, lo intentaron Daniel Londoño (2′) y Díber Cambindo (5′), sin mayor éxito.

Pero a medida que avanzó el juego, el trámite de las acciones mostró un panorama favorable al ‘poderoso, que adelantó sus líneas ante la propuesta contraria y le presionó la salida. Como a los 23′, cuando de nuevo Cambindo, a pase de Daniel Torres, se perdió lo que pudo ser el primero de la noche.

Pero el dueño de casa respondió y a los 25′, con Gastón Pereiro, se arrimó al campo del ‘Decano’, que hizo valer su solidez defensiva, con hombres como Andrés Cadavid. Nuevamente, el DIM fue a la carga, en un veloz contraataque en el que no pudo cristalizar el ariete argentino Luciano Daniel Pons.

Sin embargo, el ‘rojo’ no aprovechó y a los 37′ Pereiro, quien ya había avisado, capitalizó un rebote que dejó el golero Vásquez ante el potente disparo de Ignacio Ramírez. El atacante, con el arco a su disposición, la clavó en el ángulo superior izquierdo del pórtico visitante: para el delirio de los hinchas.

Pese al gol en contra, Medellín no renunció a su vocación ofensiva, intentando hacer daño por la zona derecha. Con todo y ello se fue al vestuario en desventaja, ante un anfitrión al que le bastó apenas un descuido para zanjar diferencia en la pizarra, más allá de no hizo mayores méritos.

En la segunda parte, el DIM se fue en búsqueda de la paridad, pero pecó en el abuso del pelotazo como fórmula ofensiva. En contraste, el dueño de casa no se afanó por ir al frente y solo de vez en cuanto quiso aprovechar las falencias por la banda diestra, aunque tampoco fue eficaz.

La iniciativa del ‘poderoso’ poco a poco se diluyó y tuvo que dedicarse a defenderse del contraataque de Nacional, que a los 70′, con un disparo que se estrelló en los palos del mediapunta Federico Martínez, por la vía del tiro libre, ante la mirada atónita de guardameta Luis Vásquez.

Pero en un gol fuera de contexto, tras un ‘bombazo’ al área, Medellín consiguió un milagro. A los 79′ apareció Pons, el goleador, quien con un centro se la puso clara al artillero, quien se levantó en solitario y la puso al palo contrario del arquero Sergio Rochet. Un tanto festejado a rabiar por el ‘rojo’.

Con la paridad, DIM apretó y a los 81′ Cambindo desperdició una clara opción, con la que pudo pasar de largo. Pero fue quizá la última posibilidad de un onceno que se cuidaba de sufrir una nueva sorpresa, frente a un elenco que buscó arrimarse, pero parecía no revertir la historia en el cotejo.

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Hasta los 90+6′, cuando dijo presente el defensa argentino Fabián Noguera, quien con un potente derechazo, a quemarropa, a pase de Bruno Damiani, vulneró la resistencia del golero Vásquez, con lo que dejó fríos a los integrantes de la nómina del ‘poderoso’. La historia volvió a repetirse.