Años antes de sacarle casi 3 minutos a Tadej Pogacar en la escalada al ‘Col du Granon’ para convertirse en el nuevo líder del Tour de Francia, Jonas Vingegaard trabajaba en una planta de pescado. 

El ascenso del pedalista nórdico a la cima de la clasificación general de la carrera más importante del mundo es una muestra de la fortaleza mental y del árduo esfuerzo requeridos para salir adelante en este deporte.

Mientras perseguía el sueño de convertirse en profesional, el joven Vingegaard trabajaba desde las 6 de la mañana hasta las 12 del mediodía en el proceso de almacenamiento y limpieza de pescado. Después de terminar su turno se montaba directamente en la bicicleta para practicar. 

“Tengo mucha más motivación para salir a entrenar cuando he trabajado”, le dijo Jonas Vingegaard al medio danés Danmarks Radio años atrás.

Desde el 2016, mientras trabajaba, el corredor hacía parte del equipo de su país ColoQuick-Cult, con el que obtuvo resultados notables en vueltas menores, destacándose en la montaña.

Sus primeras hazañas llevaron a que lo descubriera el equipo Jumbo Visma, con el cual firmó en 2018. 

Haciendo parte de este escuadrón, fue segundo en el Tour de Francia de 2021, al que llegó en calidad de gregario del esloveno Primoz Roglic, pero sorprendió al mundo con su excelente desempeño.

El año pasado, el ciclista danés fue superado únicamente por otro esloveno, Tadej Pogacar, campeón del Tour por dos años consecutivos. 

Ahora, Vingegaard supera a Pogacar, logrando lo que parecía imposible hace unas semanas.

Para mantener el liderato deberá preservar el tiempo que le lleva a su rival más cercano en las etapas de montaña y la contrarreloj de 40 km en esta última semana del Tour.

Sin embargo, no la tendrá fácil, ya que ha perdido a 2 gregarios cruciales: Primoz Roglic y Steven Kruijswik, que abandonaron la carrera después de graves caídas.

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En video, el danés en su antiguo trabajo: