Por si fuera poco, los almacenes que aún tienen un inventario de repuestos están especulando con los precios, en un país en el que el salario mínimo mensual no alcanza a llegar a los 2 dólares.

La escasez de repuestos debido a la crisis en Venezuela no solo la sienten los usuarios de vehículos, como lo expone el diario de oposición La Patilla, sino los mismos repuesteros, quienes han sufrido para importar las piezas mecánicas, dadas las dificultades impuestas por el régimen de Nicolás Maduro.

“Depende del lugar en donde te encuentres. Por lo general en los lugares céntricos como en la capital el precio es un tanto elevado, superior a los otros estados del país, como los estados Bolívar, Apure, y Táchira”, le dijo a La Patilla Ismet Castillo, propietario del establecimiento Multiservicios Imcb C.A.

En entrevista con el medio, Pedro Villar, director de la empresa Carmartek, dijo que hay muchos talleres y almacenes especializados: “Hay comercios que se especializan solo en motor, otros en bombas de agua, otros en radiadores, otros en cauchos, otros en frenos, entonces cuando vas a comprar algo tienes que conocer quién es el que tiene el mejor precio y el mejor producto, porque no todas las casas de repuestos trabajan con todas las refacciones”.

Lee También

Por su parte, la Cámara Venezolana de Fabricantes de Autopartes (Favenpa) denunció que se están importando repuestos de mala calidad e incluso usados que se hacen pasar por nuevos.

Finalmente, la escasez de repuestos se nota más en los repuestos de baja rotación, pues ocupan espacio en los anaqueles y los importadores deben propender porque su mercancía se mueva con frecuencia.

El precio final de los repuestos de incrementa, en algunos casos, porque muchos importadores ya no tienen la capacidad de comprar todo un contenedor de repuestos, al por mayor, sino que compran cantidades menores, lo que convierte su negocio en “una compra al detal para vender al detal”, que incrementa los precios y no deja el mismo margen de ganancia para los comercializadores.