Mientras rodaba la cinta ‘Gigante’, James Dean compró su bólido, al que un amigo del actor llamó ‘Pequeño bastardo’. El actor se estrelló en el vehículo el 30 de septiembre de 1955 y perdió la vida casi instantáneamente.

Del carro sobrevivió la caja de cambios con los dos ejes traseros, incluidas las campanas del freno que, según el portal de farándula TMZ, son completamente funcionales. El costo de la piezas mecánicas fue de 400.000 dólares.

El medio dice que el comprador de los fierros fue el empresario Zak Bagans, quien tiene un museo de objetos “malditos”, donde planea exhibir la pieza.

Forbes
Forbes
Lee También

El automóvil deportivo de Dean es considerado “maldito” porque allí murió la estrella de tan solo 24 años, luego de un accidente de tránsito frontal contra un Ford Tudor modelo 50 que era conducido por un estudiante.

El mito de la presunta maldición del carro de Dean es alimentado con otro hecho; como varias de las partes que quedaron del accidente fueron vendidas como repuestos y reutilizadas en otros vehículos, se dice que un hombre que conducía un carro con uno de esos repuestos murió luego de chocar contra un árbol.

La caja de cambios en cuestión es mecánica de cuatro cambios y reversa, mientras que el embrague es hidráulico; además, el precio incluye el motor de arranque, que viene adherido a la carcasa de la transmisión.

El siguiente video muestra a Dean en una competencia de autos, mientras maneja el Porsche 550 Spyder: