Por: Portal Bogotá

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Este artículo fue curado por pulzo   Dic 17, 2025 - 6:47 am
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La estrategia “Bogotá, mi Ciudad, mi Casa” tiene como objetivo principal disminuir las desigualdades sociales presentes en la capital colombiana. Uno de los mecanismos clave que lidera esta reducción de brechas es el programa Ingreso Mínimo Garantizado (IMG), cuyas transferencias monetarias correspondientes al mes de diciembre se entregan de manera escalonada a partir de esta semana, según información oficial recogida por el portal Bogotá.gov.co. Este proceso beneficia a más de 199.000 personas pertenecientes a los grupos de hogares en situación de pobreza extrema y víctimas con pertenencia étnica. A la par, más de 164.000 personas adicionales reciben el apoyo económico gracias a componentes dedicados a jóvenes, personas mayores, personas con discapacidad y miembros de la comunidad Emberá que han retornado a sus territorios.

No obstante, es relevante subrayar que durante el mes de diciembre no se realiza el pago de transferencias para los componentes de Primera Infancia y Educación. Esta medida, que según el reporte ya había sido adelantada, obedece al hecho de que durante este periodo niños, niñas y adolescentes están en receso escolar y no asisten a las jornadas académicas, en colegios oficiales del Distrito o a jardines infantiles y Centros Crecer administrados por la Secretaría Distrital de Integración Social. La asistencia a clases es una de las condiciones obligatorias para acceder a estos incentivos económicos, razón por la cual la entrega de fondos se retoma cuando se reanudan las actividades escolares.

La inversión pública destinada a esta iniciativa en diciembre supera los 49.000 millones de pesos, una suma que refleja el compromiso institucional de terminar el año con una ejecución presupuestal acumulada de más de 597.000 millones de pesos en el 2025, bajo la dirección del alcalde Carlos Fernando Galán. Esto confirma, de acuerdo con la fuente oficial, la importancia de mantener una política social que prioriza a las poblaciones más vulneradas de la ciudad y otorga recursos directos que alivian situaciones de riesgo y exclusión.

El programa reparte los pagos de acuerdo a la clasificación de los beneficiarios, agrupados en diferentes componentes: hogares en extrema pobreza, víctimas con pertenencia étnica, jóvenes, personas mayores, personas en condición de discapacidad y miembros de comunidades originarias regresadas a sus territorios. El carácter escalonado de la dispersión asegura que el proceso logístico pueda responder a las necesidades y particularidades de cada grupo, manteniendo la transparencia y la eficiencia administrativa.

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En este contexto, “Bogotá, mi Ciudad, mi Casa” se consolida como una estrategia robusta enfocada en disminuir la vulnerabilidad mediante apoyos focalizados y temporales, que se adaptan al ciclo académico y a la dinámica de atención social. Al establecer reglas claras sobre la entrega y suspensión de pagos según la asistencia escolar o el tipo de beneficiario, la administración pretende maximizar el impacto y la equidad del IMG, alineando los recursos a la realidad educativa y social de la ciudad.

¿Qué requisitos debe cumplir una familia para acceder al Ingreso Mínimo Garantizado en Bogotá?

Esta pregunta surge al considerar los amplios grupos de la población que están recibiendo el apoyo de esta política social en la ciudad. La identificación de los requisitos y procesos para acceder al Ingreso Mínimo Garantizado permite entender cómo se define la población priorizada, cuáles son los criterios para ser beneficiario y cómo se mantiene la transparencia del sistema.

Entender los requisitos resulta fundamental para familias interesadas en recibir este apoyo económico temporal, así como para diseñar intervenciones sociales más efectivas. La participación activa en los programas educativos o sociales, la residencia en Bogotá y la pertenencia a los grupos contemplados —pobreza extrema, víctimas, jóvenes, mayores, personas con discapacidad y comunidades indígenas retornadas— constituyen elementos centrales que las autoridades evalúan para autorizar las transferencias, garantizando que los recursos lleguen a quienes más los requieren.


* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.

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