La cocina es una de las áreas de tu casa que más mantenimiento necesita, y aunque queremos que sea sencilla y rápida, muchas veces nos tardamos más de la cuenta y se vuelve un oficio más dispendioso de lo que nos gustaría.

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Lo cierto es que la limpieza de la cocina es algo que no puede dejar de hacerse, en general, no solo porque queremos ver que nuestros espacios estén siempre lo más limpios y agradables, sino también para evitar cualquier tipo de contaminación.

En la cocina se pueden proliferar microorganismos y bacterias cuando cocinamos, especialmente cuando cocinamos carnes crudas, botamos desechos orgánicos, o dejamos más tiempo de lo necesario platos sin lavar o basura sin sacar de nuestra casa.

Lo cierto es que preferiríamos que nuestra casa siempre esté impecable, tanto para nosotros como para nuestros visitantes e invitados.

Trucos para dejar tus muebles impecables

Para esto, tenemos algunos trucos que te ayudarán a limpiar de manera sencilla y además mantener en las mejores condiciones tu casa y tu cocina, sin que sea demasiado difícil volver a limpiar al día siguiente.

Usa paño o tallas de papel para los vidrios

Siempre que quieras limpiar un cristal o vidrio, tanto si son ventanas como superficies planas como la estufa, es clave humedecer con un paño sin motas o toallas de papel antes de limpiar.

Usa un cepillo con vinagre para lo metálico y los gabinetes de madera

Para limpiar la madera y los herrajes metálicos sumerge un cepillo de dientes que ya no utilices en una solución de mitad vinagre, mitad agua tibia y frótalo, especialmente en los lugares en los que la madera tiene ranuras.

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Usa aceite de naranja para quitar grasa acumulada

Además, la grasa se acumula fácilmente en diversos espacios de la cocina y suele acumularse, y si no se limpia con regularidad, puede volverse en un peor problema más adelante. Para esto, te recomendamos el aceite de naranja. Solo déjalo reposar dos a cuatro minutos y remueve con un paño húmedo.

No olvides el bicarbonato

Recuerda que el bicarbonato de sodio es un gran aliado a la hora de limpiar y más aún cuando se combina con vinagre blanco. Solo se debe mezclar con un poco de agua tibia y también con un cepillo de cerdas suaves. No dejes de intentarlo para que tu casa quede libre de bacterias, grasa, polvo y suciedad.