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El inicio del Año Nuevo abarca una serie de rituales y prácticas que están destinadas para atraer prosperidad, buena fortuna y protección para el año entrante. Una de estas costumbres incluye colocar una espiga detrás de la puerta durante la transición al nuevo año. Esta acción está impregnada de creencias arraigadas en la superstición y la tradición popular.
(Vea también: Rituales para atraer prosperidad en el 2024: que no le falte la plata en el nuevo año)
¿Por qué se pone la espiga detrás de la puerta en Año Nuevo?
Esta práctica es común en varias culturas y se considera un gesto simbólico para asegurar la entrada de la fortuna y el bienestar en el hogar durante el nuevo año.
Poner la espiga detrás de la puerta se basa en la idea de mantener la puerta entreabierta como un símbolo de recibir y permitir la entrada de la buena suerte y las oportunidades que trae consigo el nuevo ciclo. Se cree que esto favorece la llegada de bendiciones y buenas energías al hogar mientras se evita que la fortuna escape.
Además, la espiga detrás de la puerta se asocia con alejar las energías negativas y las desgracias. Al dejar la puerta entreabierta, se simboliza el rechazo a las influencias negativas, manteniendo así un ambiente más propicio para el bienestar y la fortuna en el año entrante.
Esta tradición está arraigada en la esperanza y la búsqueda de un futuro próspero varía en su interpretación y práctica según las distintas culturas, pero en su esencia, refleja el deseo compartido de iniciar el año con augurios positivos y protección para el hogar y sus habitantes.
*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de Robby Bienestar con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano.
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