Algo fundamental en enfermedades articulares es la dieta, tener una buena dieta balanceada, contar con suplementos alimenticios, así como vitaminas y minerales, serán fundamentales para ayudar a tratar ésta enfermedad.

La Osteoartritis (OA) es una forma de artritis en la que una o más articulaciones sufren cambios degenerativos, entre los que se incluyen la esclerosis ósea, la perdida de cartílago articular y la proliferación de hueso y cartílago, generando osteofitos o comúnmente llamados espolones.  Estos cambios afectan estructuras que comprenden y rodean la articulación, como: la cápsula articular, el hueso subcondral, ligamentos, músculos y tendones. Estas alteraciones producen dolor, claudicación o cojera, e incluso postración. Si este dolor se hace crónico, se alterará la calidad de vida, generándose cambios en el comportamiento y apetito. (No come adecuadamente y puede estar renuente a hacer algún ejercicio, a la caricia, incluso agresivo si es tocado, en donde hay dolor).

Es la enfermedad articular más común, afecta principalmente a perros de edad media y avanzada, 1 de cada 5 sufrirán esta enfermedad, algunas razas como el pastor alemán o el labrador retriever presentan predisposición genética; aproximadamente el 45% de los perros de raza grande la padecerán en algún momento.

La osteoartrosis suele ser secundaria a trastornos músculo-esqueléticos (los más frecuentes son la displasia de cadera o de hombro y la inestabilidad articular), siendo el agente causante el efecto biomecánico sobre la actividad, hay factores que aceleran la evolución del proceso. Entre ellos: el sobrepeso y la edad. Ocurre en algunos perros jóvenes después de que han tenido alguna lesión en las articulaciones o ligamentos.

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Las articulaciones más afectadas son: Codo, Carpo (muñeca), Rodilla, Columna, Cadera. Generalmente es debido a una causa secundaria, por ejemplo, un traumatismo, obesidad o ejercicio físico intenso y excesivo.

Hay afecciones articulares congénitas severas que existen en el perro joven y pueden conducir a osteoartritis secundarias como: Osteocondritis dissecante (OCD), Displasia de codo (incluye OCD), Displasia de cadera, Luxación de rotula.

Hay alteraciones adquiridas a lo largo de la vida de nuestro perro, que pueden afectar la integridad del cartílago articular como: Fracturas articulares y luxaciones, Rotura de ligamentos, el más común el craneal cruzado.

Síntomas de la osteoartritis canina

Los síntomas son diversos y puede manifestar unos u otros, dependiendo del grado de la enfermedad, que puede ir, desde leve hasta severo, manifiesta algunos síntomas y signos como:

  • Letargo
  • Rigidez
  • Gruñidos y gemidos
  • El perro evita moverse
  • Agresividad si se quiere tocar la zona afectada
  • Cojera o claudicación
  • Cojera tras ejercicio
  • Dificultad al levantarse
  • Dificultad para moverse
  • Pérdida del apetito

La recomendación es que acudas al Médico Veterinario de tu confianza si ves cualquiera de los síntomas o signos descritos o si tu perro presenta sobrepeso, es de raza mediana a grande y tiene más de 5 años para diagnosticarla, de manera general, es mediante la exploración física y radiografías.

En cuanto al tratamiento, los objetivos terapéuticos son muy concretos: aliviar las molestias y frenar la degeneración. El tratamiento médico suele ser sintomático:  tendrá una terapia antiinflamatoria (AINE), fármacos condroprotectores (condroitín sulfato y glucosamina) así como analgésicos.

La parte más importante del tratamiento es el manejo multimodal higiénico-dietético, y lograr una combinación de pérdida de peso, disminución del dolor y reposo. La fisioterapia también es parte fundamental: ejercicios moderados, de bajo impacto, ejercicios de movimiento pasivo, tratamiento con frío/calor, masajes musculares y articulares, ultrasonido.