En un contexto donde el hecho de comer fuera del hogar se ha vuelto un gasto difícil de sostener para muchas personas, surge en el Quindío una propuesta que reinventa la tradición cotidiana de llevar comida desde casa, bautizada comúnmente como "traer la coquita". Es así como Ricardo Jiménez Neto, tras años de experiencia en restaurantes, da vida a La Olla Buffet, un concepto que rompe con la lógica tradicional del servicio de comidas en restaurantes. Su enfoque se centra en facilitar la vida a quienes buscan alimentarse de forma balanceada y económica, evitando el incremento constante de precios que afecta al bolsillo de los clientes frecuentes.
Jiménez explicó que, luego de analizar los costos de un almuerzo corriente, identificó que la proteína es el principal responsable del elevado precio que deben pagar los consumidores diariamente. A partir de esta observación, La Olla Buffet diseñó un método en el que las personas pueden complementar el almuerzo que traen desde casa, adquiriendo únicamente las porciones que realmente necesitan. Fríjoles, arroz, guisos, sopas y otros acompañamientos se venden de forma separada, eliminando el formato de plato fijo y permitiendo una mayor personalización y control sobre el gasto.
El impacto económico es notable. De acuerdo con Jiménez, mientras que un almuerzo convencional puede ubicarse en el rango de los 20.000 pesos, en La Olla Buffet una porción completa ronda los 10.000 pesos. Esta diferencia, perceptible cuando se suman los gastos a final de mes, representa un alivio para los trabajadores y habitantes del Quindío que buscan ahorrar sin renunciar a sabores tradicionales ni a la calidad alimenticia.
No solo el precio marca la diferencia de La Olla Buffet, sino también su intención de transformar la percepción social asociada con el término “olla”. Según relata Ricardo Jiménez en la entrevista para Crónica del Quindío, la denominación fue elegida para reivindicar lo positivo de la cocina familiar, donde la olla es símbolo de unión, alimento y tradición. En su menú, destacan recetas autóctonas que varían a diario, manteniendo a los fríjoles como producto central, preparados especialmente para que puedan ser disfrutados tanto por vegetarianos como por quienes deseen acompañamientos cárnicos.
El funcionamiento sencillo de este modelo se refleja en la estructura del negocio: solo dos personas por local se ocupan de la preparación y atención, lo que propicia un ambiente más cercano y cordial. El primer establecimiento abierto en Calarcá cumplió tres años, y su sucursal en Armenia lleva casi un año conquistando clientes. El crecimiento ha sido evidente gracias a la recomendación boca a boca, reflejando la confianza y satisfacción de quienes encuentran una alternativa colaborativa tanto para comerciantes como para clientes.
En Calarcá, La Olla Buffet abre todos los días, y en Armenia de lunes a sábado. Desde las 10:30 de la mañana hasta que se acaba la comida, desfilan oficinistas, personal de la salud y trabajadores, quienes valoran la posibilidad de complementar su almuerzo diario de forma saludable y asequible. Ricardo Jiménez resalta las muestras de gratitud recibidas de sus clientes, quienes aprecian el equilibrio entre calidad y economía en tiempos de dificultades para consumir fuera de casa.
De esta manera, La Olla Buffet no solo distribuye porciones alimenticias sino que fortalece el sentido de comunidad y rescata la cocina popular en uno de los departamentos más representativos de la gastronomía nacional.
¿De qué manera se elige el menú diario en La Olla Buffet?
Esta pregunta surge porque el dinamismo y la variedad forman parte clave de la filosofía de La Olla Buffet, en donde solamente los fríjoles permanecen fijos a diario y los demás platos cambian. Entender cómo se decide cada día qué preparar permitiría conocer cómo se mantiene el atractivo del menú para los clientes habituales y cómo se adaptan a las preferencias o necesidades alimentarias de la comunidad.
Además, saber el proceso detrás de la selección de recetas tradicionales permite valorar el compromiso del negocio con la identidad local y con la satisfacción de un público diverso, que incluye tanto a quienes buscan opciones vegetarianas como a quienes prefieren combinaciones más clásicas de la olla doméstica.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO