1. Caminar por el centro de Willemstad
La arquitectura colorida de las zonas de Punda y Otrobanda es un deleite para todos los turistas. Hay restaurantes, hoteles, tiendas, museos y fuertes militares característicos de la isla, tal como indica el sitio web oficial de Curazao.
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Algunos de los lugares más interesantes son Plaza Brion (Brionplein), el Museo Kura Hulanda, el Mercado Flotante, la Plaza Wilhelmina Park y los fuertes Waterfort y Fort Amsterdam en Punda, entre otros.
2. Visitar el acuario
El Curaçao Seaquarium está construido frente al océano en Bapor Kibra, lo cual produce que, por sus aguas abiertas, este acuario sea uno de los más especiales del mundo, ya que el mar corre por el lugar de forma continua.
3. Nadar con delfines
En el Curaçao Dolphin Academy, los turistas pueden conocer a los delfines, nadar con ellos, practicar esnórquel e incluso bucear junto a estos hermosos animales, que seguramente le sacarán una sonrisa a más de uno.
4. Descubrir los tesoros de las profundidades del mar
Curazao tiene algo espectacular, el Aquafari, un ‘scooter’ sumergible ecológico, en el que los visitantes pueden admirar una variedad impresionante de peces. Además, podrán nadar entre los más coloridos arrecifes.
Lo más importante es que no se necesita experiencia de buceo para entrar a este safari subacuático.
5. Ruta de aventura
En Cuatriciclo, Buggy o Jeep, todos pueden visitar las cuevas y terrenos con unas vistas insuperables. Lo mejor es que en la isla hay operadores que ofrecen toda la experiencia.
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