La energía que consume el organismo diariamente debe ser compensada y el cuerpo de los niños requiere de varios grupos nutricionales para un desarrollo óptimo. Por esto, la experta aseguró que diariamente una lonchera debe llevar: una fruta, una proteína, una harina y agua (nada de jugos en caja u otra bebida procesada).
En cuanto a las frutas, Obregón aseguró que cualquiera funciona. Aunque recomendó la manzana, la pera, la papaya y la piña. Para las dos primeras recomendó enviarlas enteras o usar un poco de limón para evitar su oxidación.
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Como explicó la especialista, las proteínas son indispensables en la lonchera, pues contienen una gran cantidad de vitamina D y calcio. Una forma de variar este alimento está entre la leche, el yogur (preferiblemente griego), el queso y el jamón. En el caso de las personas veganas, pueden reemplazar estas comidas por la soya, leche de almendras y quinua, aunque la ración debe aumentar un 30 %.
Cuando se habla de los carbohidratos, Obregón aseguró que las galletas de avena son una excelente alternativa o un pan. En este caso, existen muchas variaciones, pero es necesario evitar aquellas que sean procesadas o tengan azúcares añadidos.
Y para concluír, el agua es la mejor alternativa para que el pequeño esté muy bien hidratado, no existe una mejor bebida.
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