Thanun, con más de 18 años de experiencia como piloto y 18.000 horas de vuelo, aseguró que necesita más ingresos para hacer frente a sus gastos, préstamos del banco y también los salarios de dos trabajadores de un restaurante que abrió este año y que tuvo que cerrar debido a la pandemia.

Todas las mañanas, Thanun se pone la chaqueta verde con el logotipo de Grab, la compañía de reparto a domicilio, y sale a las calles de Bangkok con una moto BMW, la cual contrasta con los medios de transporte de otros repartidores.

Reconoce que uno de sus objetivos es desmontar la idea de que los pilotos tienen “mucho ego” y no se rebajan a hacer trabajos no cualificados.

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De su nuevo empleo como repartidor, el capitán, que prefiere no desvelar para qué aerolínea trabaja, asegura que lo más difícil es aguantar el calor tropical, ya que abril es el mes más caluroso del año en Tailandia, y también encontrar algunas direcciones en las intrincadas calles de Bangkok.

“A veces el mapa de Google no es muy exacto”, según Thanon.

El tailandés afirma que trabaja siete días a la semana y que gana unos 1.500 bat brutos al día (186.000 pesos), aunque ha llegado a hacer el doble en una buena jornada.

Thanun, que solía pilotar un Airbus 330, creó una cuenta de Line en la que otros pilotos y tripulantes de avión comparten experiencias ante la falta de trabajo o disminución de ingresos. Asimismo, creó una página en Facebook donde alienta a los demás en esta época tan crítica.

“Me gustaría animar a todo el mundo en vencer juntos esta crisis”, señala Thanun en un mensaje a sus compatriotas en una de las crisis más graves de las últimas décadas en este país.

A continuación puede ver fotos del ahora domiciliario:

EFE.
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