Heriberto Vera, dueño de la clínica fue el médico que la asistió y que, el pasado sábado, declaró la muerte clínica de la mujer, informó La Nación.
De acuerdo con el medio, el cuerpo de Gladys fue trasladado a una funeraria; allí, justo cuando los trabajadores le iban a aplicar formol, la mujer empezó a moverse.
De inmediato, según Noticias PY, Gladys fue trasladada al hospital del Instituto de Previsión Social (IPS), de donde la remitieron a la unidad de terapia intensiva del Hospital Regional de Coronel Oviedo, donde se encuentra delicada, pero estable.
Ese canal indicó que los familiares de la mujer acusan al doctor Vera de negligencia médica; entre tanto, él se defendió de las acusaciones e intentó dar una explicación de lo sucedido.
En entrevista con el medio, el médico aseguró que declaró la muerte clínica de Gladys al ver que su presión arterial, frecuencia cardíaca y respiración estaban en cero.
El profesional añadió que, al parecer, se trató de un caso de catalepsia, un trastorno por el cual una persona pierde la conciencia durante un tiempo y presenta “disminución del ritmo cardiaco y la respiración”, explicó El Heraldo de México.
Vera también indicó a Noticias PY que nunca, en sus varios años ejerciendo la medicina, se le había presentado un caso como este.
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