Nina y Chris Cardinal decidieron instalar una cámara para resolver este misterio y lo que encontraron fue enternecedor.  Sus dos golden retriever, Colby y Bleu, eran los causantes de estas constantes fugas.

El artículo continúa abajo

Ellos abrían la puerta con ayuda de sus narices, encontraban la forma de despertar a la bebé con lengüetazos y hasta subiéndose a la cama para que su dueña saliera a jugar con ellos en la madrugada, así lo indica el medio de comunicación La Nación de Costa Rica.