Un sacerdote tuvo que disculparse públicamente después de recibir constantes críticas al celebrar una de sus misas en la playa, puntualmente dentro del mar, donde la ceremonia la ofreció en vestido de baño y usando un colchón inflable para poner las cosas como si fuera su altar en la iglesia.
Tras recibir fuertes comentarios, el cura decidió dar una explicación y dar las razones pertinentes del por qué hizo así su eucaristía. Se trata de Mattia Bernasconio, quien había planeado su misa en los árboles que se ubicaban junto a la playa Crotone, ubicada en el sur de Italia. Sin embargo, cuando llegó al lugar de los hechos, se dio cuenta que estaba ocupado por otro grupo, razón por la que decidió aceptar el ofrecimiento de una familia cercana que le habría puesto a su disposición un colchón inflable para usarlo como altar.
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Así que, sin pensarlo mucho, el sacerdote saltó al agua y organizó todo, aunque desafortunadamente las personas juzgaron su hecho al no estar en un lugar adecuado para ejercer su labor de cura. “Es necesario mantener ese mínimo de decoro y atención a los símbolos requeridos por la naturaleza misma de las celebraciones litúrgicas”, comentó la arquidiócesis de Crotone.
El sacerdote decidió responder a las ofensas y defendió sus acciones, aunque también ofreció las disculpas para quienes sintieron que su labor de curo se había visto tachada por malos actos.
“No era mi intención en absoluto trivializar la eucaristía… era simplemente la misa al final de una semana de trabajo. Pero los símbolos son fuertes, es cierto, y hablan, a veces de una manera diferente a la que nos gustaría. Fue ingenuo de mi parte no darles la debida importancia”, comentaba el protagonista de esta historia.
El hecho, finalmente quedó fotografiado y grabado por los asistentes, quienes compartieron el material en las redes sociales, donde el cura recibió los diferentes comentarios.
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