El agresor, que no fue identificado por la policía canadiense, llegó hasta la farmacia en la que su esposa estaba recibiendo la vacuna contra el COVID-19, detalló la cadena CBC. 

Una vez entró al lugar, el hombre atacó a la enfermera y la recriminó por vacunar a su esposa, la cual, según dijo él, “no le pidió permiso” para recibir el biológico contra el coronavirus, agregó ese canal. 

“El hombre entra, rápidamente acusa a la enfermera de vacunar a su esposa sin su consentimiento y luego la golpea varias veces en el rostro”, indicó a ese medio Martin Carrier, vocero de la policía de Sherbrooke. (Vea también: 241 millones de vacunas contra el COVID-19 podrían perderse si países ricos no las donan).

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Posteriormente, el individuo escapó antes de que llegara la policía o de que pudiera ser identificado por las cámaras de seguridad del lugar. Por su parte, la enfermera atacada fue llevada a un centro médico de la zona y ya está fuera de peligro, recuperándose en su casa, apuntó ese informativo. 

Aunque la policía no ha obtenido videos o fotos del sujeto, testigos lograron identificarlo como un hombre de entre 30 y 45 años, de pelo corto oscuro, cejas grandes y un tatuaje de una cruz en una de sus manos, añadió la cadena WWNY. 

Las autoridades canadienses hicieron un llamado para denunciar al sujeto. De igual forma, recalcaron que la gente es libre de vacunarse y no necesita de ningún tipo de consentimiento con tal de ser mayor de edad, señaló ese canal. 

“Condenamos este gesto, que consideramos inaceptable para los trabajadores de farmacias que han estado proporcionando servicios esenciales desde el inicio de la pandemia”, resaltó a ese medio la compañía Brunet, propietaria de la farmacia en la cual se dio el ataque. 

Por su parte, la Orden de Enfermeras de la provincia de Quebec también emitió un comunicado en el que rechazó lo ocurrido y deseó una pronta recuperación a la trabajadora atacada. 

“¡Tolerancia cero! Esta lamentable situación es inaceptable para cualquier profesional de la salud. Deseamos a esta enfermera una pronta recuperación”, escribió la entidad en Twitter:

Los hechos se dieron en Sherbrooke, Canadá:

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