El déficit de especialistas reumatólogos afecta el tratamiento y acompañamiento de los pacientes con enfermedades reumáticas, debido a que las citas son lejanas y hay poca disponibilidad de agenda.

La reumatología “es una rama de la medicina interna que se encarga de ver enfermedades no quirúrgicas del sistema musculoesquelético”. Así lo definió la doctora Ana María Arredondo, presidenta de la Asociación Colombiana de Reumatología (ASOREUMA) y doctora del Hospital Universitario San José.

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También mencionó que ASOREUMA realizó en 2018 un estudio de prevalencia de enfermedades reumáticas en Colombia y se encontró que el 1.49 % de los colombianos está afectado de Artritis Reumatoide, seguido del Síndrome de Sjögren, el Lupus Eritematoso Sistémico y la Esclerosis Sistémica con el 0.08%, 0.05 % y 0.02 % de prevalencia, respectivamente.

Por otro lado, según el doctor Daniel Gerardo Fernández, director de la especialización en Reumatología de la Universidad Pontificia Javeriana y miembro de ASOREUMA, “es una especialidad importante porque, aunque estas enfermedades tienen una frecuencia relativamente baja, potencialmente pueden causar discapacidad y afectaciones en la calidad de vida de la gente”.

Teniendo en cuenta la relevancia y prevalencia de las enfermedades reumáticas en Colombia, es posible afirmar que se necesita un tratamiento adecuado y un acompañamiento ideal. Sin embargo, aunque el sistema de salud colombiano “es tal vez uno de los mejores del mundo, ya que nuestras terapias son muy costosas y eso es garantizado al 100% por el sistema de salud y nuestra cobertura en los tratamientos es de las mejores no solo en Latinoamérica sino del mundo”, -dijo Fernández,- “hay un déficit notable de especialistas que traten enfermedades reumáticas”. Por esa razón, hay poca disponibilidad de agenda y las citas son lejanas.

Tal y como lo declaró Gloria Vásquez, paciente reumática de Fibromialgia y Síndrome de Raynaud: “Siento que no hay tantos especialistas, las citas por la EPS son mucho más demoradas. La solución sería tener más especialistas para que pudieran cubrir más personas en la sociedad”. Esto evidencia que “la dificultad para los pacientes es llegar al especialista primero, conseguir las citas para primera vez y para seguimiento”, afirmó Claudia Mora, reumatóloga y profesora asociada de la Facultad de Medicina de la Universidad de La Sabana.

Asimismo, Gloria Vela, paciente reumática de Artritis Reumatoide, Artrosis, Osteoporosis y Fibromialgia, declaró que “el tratamiento de mis enfermedades ha sido regular, las citas son muy lejanas. En cuanto al tratamiento, los medicamentos no siempre son los mejores y se necesita más atención a las personas que tenemos estas enfermedades”. 

El déficit es real. “Hay un estándar de la OMS donde dice que debería haber un reumatólogo por cada 50 mil habitantes. Nosotros, en Colombia, somos aproximadamente 260 en ASOREUMA. Todavía estamos muy lejos de llegar a tener el número de reumatólogos que deberían”, declaró Arredondo. Sumó que a estos pacientes no hay otro especialista que le pueda tratar su enfermedad por lo que es importante que haya más reumatólogos para que puedan cubrir la totalidad de personas que necesiten atención por ellos.

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Es cierto que la renovación generacional se está dando de manera positiva y de esa manera cada año van llegando más reumatólogos, pero, ni contemplando esto a un futuro cercano, alcanzaría el número de especialistas que se necesitan.

Una posible solución que plantea el doctor Daniel Gerardo Fernández es un algoritmo que desarrolló en su tesis doctoral epidemiológica para apoyar al médico no reumatólogo a mejorar su diagnóstico. A partir de ese algoritmo, con el Instituto Científico Pfizer, se está desarrollando un software de inteligencia artificial para que el médico introduzca los datos y el sistema le arroje un probable diagnóstico. 

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Entonces, “este tipo de herramientas y estrategias son muy válidas para ayudar especialmente al médico no reumatólogo. Va a permitir que remitan mejor a los pacientes que sí tengan enfermedades reumáticas y hacer óptimo el trabajo de nosotros”, mencionó Fernández. Se debe garantizar la difusión, compromiso y gestión de esta herramienta por parte de los aseguradores y del Estado de que a todos los pacientes reumáticos (así estén en las zonas más alejadas del país) se les dé acceso a la atención y a las tecnologías de salud y “veamos una mejora sustancial en estos tratamientos tan necesarios”. 

Por: Ana Sofía Rubiano.

*Estas notas hacen parte de un acuerdo entre Pulzo y la Universidad de la Sabana para publicar los mejores contenidos de la facultad de Comunicación Social y Periodismo. La responsabilidad de los contenidos aquí publicados es exclusivamente de la Universidad de la Sabana.