Llegó una buena opción para las personas nos les agrada quedarse ‘congelados’ o tener un ‘delay’ de segundos, que es lo que se conoce como latencia, que retrasa la dinámica del juego y resulta ser molesto. Para evitar estas situaciones, la tecnología de ‘Edge Computing’ evita que los datos recorran grandes distancias en su procesamiento y que regresen a los lugares en donde son necesarios, lo que puede significar una reducción de la diferencia de 10 a 5 milisegundos, algo que un jugador ‘online’ realmente necesita y aprecia.

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Todos conocemos Fornite, uno de los juegos con más impacto en el mundo, posee cerca de 350 millones de cuentas y 2.500 millones de conexiones de amigos. En algunos momentos puede llegar a tener 8,3 millones de jugadores en simultáneo, sin considerar eventos en tiempo real. Su audiencia es notoria.

Justamente el éxito masivo de este tipo de juego no sería posible sin las tecnologías mencionadas, que les permiten a los ‘gamers’ jugar sin interrupciones, brindando a los usuarios una experiencia eficaz y de calidad. Lo mejor de todo, sin tener que preocuparse por el lugar en el que se encuentra conectado.

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“Además de la latencia, el ‘Edge Computing’ es capaz de entregar seguridad, velocidad y capacidad en la protección de datos. Según IDC, para 2025 más de 50.000 millones de dispositivos se conectarán a Internet y la mayoría sería gestionada por ‘Edge Computing’. Con esta tecnología es posible desarrollar casi cualquier solución innovadora”, afirmó David Lacobucci, director Comercial de Cirion Technologies.


Y es que la industria de los videojuegos en el mundo ha alcanzado unos niveles altísimos de audiencia que tiempo atrás hubiera sido impensable. Según el informe ‘Global Games Market’, llevado a cabo por ‘Newzoo’, en el mundo hay más de 3.000 millones de ‘gamers’.

Por su parte, ‘Statista Digital Market Outlook’ indica que en 2021 el ‘gaming’ tuvo unos ingresos globales totales de más de 156.000 millones de dólares. De los seis mayores mercados mundiales de videojuegos, cuatro se encuentran en Asia y son encabezados por China, en donde se prevé que en 2025 habrá facturaciones de más de 70.000 millones de dólares.

 

 

 

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