Las revelaciones sobre el alcance del espionaje en algunos países a través del programa Pegasus levantó una oleada de condenas en todo el mundo por el uso de este tipo de métodos de inteligencia militar en el rastreo de información privada de periodistas, políticos y defensores de derechos humanos, entre otras víctimas.

A medida que avanza la investigación de un consorcio de medios internacionales, coordinados por la organización francesa Forbidden Stories y con apoyo técnico de Amnistía Internacional (AI), crece el escándalo y los gobiernos supuestamente implicados niegan con mayor vehemencia su relación en el uso ilegítimo del software de la firma tecnológica israelí NSO Group.

Las organizaciones Forbidden Stories y Amnistía Internacional obtuvieron una lista de 50.000 números de teléfono, seleccionados por los clientes de NSO desde 2016 para ser potencialmente espiados y la compartieron con un consorcio de 17 medios que revelaron su existencia.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, el rey de Marruecos, Mohamed VI, y el primer ministro de Pakistán, Imran Khan, figuran en la lista de posibles objetivos del espionaje mediante Pegasus, al igual que más de 180 periodistas de todo el mundo que habrían sido espiados por diversos Estados que han tenido acceso al software de NSO.

Pegasus puede instalarse en un teléfono para recuperar mensajes, fotos y contactos, y para activar micrófonos y cámaras a distancia.

“Programas desarrollados por empresas israelíes como Pegasus de NSO implican claramente al Estado de Israel. Aunque las autoridades israelíes solo hayan desempeñado un papel indirecto, no pueden eludir su responsabilidad”, afirmó RSF en un comunicado.

El software no sirve para proteger sino para infiltrarse en sistemas informáticos, por lo que se considera un producto de ciberseguridad ofensivo y debe recibir luz verde del ministerio de Defensa israelí para ser vendido a terceros países, igual que un arma.

“Hacemos un llamamiento al primer ministro [israelí] Naftali Bennett para que imponga inmediatamente una moratoria a la exportación de tecnología de vigilancia hasta que se establezca un marco normativo de protección”, dijo el secretario general de RSF, Christophe Deloire, en el comunicado.

En una conferencia sobre cibertecnología en Tel Aviv, Bennett, que hizo su fortuna en el sector tecnológico antes de entrar en política, defendió el miércoles este floreciente sector israelí.

Lee También

“Por cada 100 dólares que se invierten en ciberdefensa en el mundo, 41 se invierten en empresas israelíes”, dijo, atribuyendo la prosperidad del sector a las unidades de élite del ejército que sirven de incubadoras para nuevas empresas.

Presidente francés Emmanuel Macron, víctima de Pegasus

El presidente francés, Emmanuel Macron, figura en una lista de posibles objetivos del programa informático Pegasus, que algunos Estados utilizaron para espiar a personalidades, según revelaciones difundidas este martes que también apuntan a otros dirigentes de todo el mundo.

El lunes, los medios que desvelaron el escándalo ya señalaron que el entorno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, también habría sido un objetivo, aunque este descartó este martes emprender acciones legales.

El grupo de periodistas Forbidden Stories y la asociación Amnistía Internacional obtuvieron una lista de 50.000 números de teléfono seleccionados desde 2016 por los clientes del grupo israelí NSO, que creó Pegasus, para una eventual vigilancia.

Ambas organizaciones compartieron a continuación la lista con un consorcio mundial de 17 medios de comunicación, entre ellos The Washington Post, The Guardian y los mexicanos Proceso y Aristegui Noticias, que revelaron su existencia el domingo.

El diario Le Monde y Radio France, dos miembros del consorcio, revelaron este martes que el número del presidente francés figuraba “en la lista de los números seleccionados por un servicio de seguridad del Estado marroquí”, usuario de Pegasus.