En las últimas horas, apareció una nueva grabación de los momentos previos al atentado que sufrió Miguel Uribe y que lo tiene entre la vida y la muerte. El precandidato presidencial justamente hablaba de la violencia que vivió por la muerte de su madre.
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Uribe se encontraba en un parque del barrio Modelia, dando un mensaje frente a algunos de sus simpatizantes, cuando un menor de 14 años le disparó por la espalda.
Su discurso estuvo marcado por algunas preguntas que le hacían sus asistentes, pero también habló de la creciente ola de violencia que vive el país y recordó el lamentable asesinato de Diana Turbay.
“Desafortunadamente, nos están llevando a un pasado de violencia, a un pasado de guerra al que no queremos volver. En carne propia viví lo que implica la violencia. Ustedes lo recuerdan, hace treinta años perdí a mi mamá”, fueron algunas de las palabras del parlamentario.
Miguel Uribe habló de un robo que había ocurrido cerca de donde sufrió el atentado
En medio de sus palabras, se refirió a la inseguridad de Bogotá y de una manera paradójica se refirió a hechos delincuenciales que se habrían vivido antes del inicio del diálogo con la comunidad.
“Ahora aquí, estaban correteando a unos delincuentes, a unos bandidos, a menos de una cuadra se estaban robando una droguería y hoy estamos una vez más en guerra, una guerra muy dolorosa”, agregó el precandidato.
Su intervención daba fe del panorama de inseguridad y no se imaginaba de lo que estaba a punto de pasar. Por lo que sus palabras y lo que ocurrió minutos después despiertan gran preocupación en los ciudadanos.
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¿Cómo fue el tentado contra Miguel Uribe?
El pasado 7 de junio de 2025, el senador colombiano y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay fue víctima de un atentado en Bogotá mientras desarrollaba un acto de campaña en el parque El Golfito, ubicado en el barrio Modelia. Según informó El Espectador, un menor de 14 años identificado como Juan Sebastián Rodríguez Casallas disparó en al menos seis ocasiones contra Uribe, hiriéndolo gravemente en la cabeza, el cuello y una pierna.
El joven atacante fue rápidamente reducido por miembros de la seguridad del senador y agentes de la Policía Nacional. De acuerdo con Noticias Caracol, el menor resultó herido en el pie durante el intercambio de disparos y fue trasladado a un centro médico bajo estricta vigilancia policial. En su declaración ante las autoridades, el adolescente dijo haber actuado “por plata, por mi familia”, lo que causa un fuerte debate sobre la instrumentalización de menores por parte de redes criminales.
Uribe fue llevado inicialmente al Centro Médico de Engativá y luego trasladado a la Fundación Santa Fe, donde fue sometido a una cirugía neuroquirúrgica y vascular de urgencia. Según el más reciente parte médico citado por Semana, aunque el senador salió con vida de la intervención quirúrgica, su estado sigue siendo reservado y bajo observación en la unidad de cuidados intensivos.
El fiscal general de la Nación declaró que el ataque no fue un hecho aislado, sino que se investiga una posible conexión con redes de microtráfico que podrían estar detrás del atentado. El Tiempo informó que la Fiscalía imputó al menor por tentativa de homicidio agravado y porte ilegal de armas, y ha solicitado su internación en un centro especializado para adolescentes infractores.
El atentado provocó una oleada de reacciones nacionales e internacionales. El presidente Gustavo Petro expresó su solidaridad con la familia Uribe Turbay y recordó el asesinato de la madre del senador, la periodista Diana Turbay, en 1991. Asimismo, líderes como Gabriel Boric (Chile), Daniel Noboa (Ecuador) y María Corina Machado (Venezuela) condenaron el ataque. Desde Estados Unidos, el senador Marco Rubio y la congresista María Elvira Salazar pidieron garantizar la seguridad de los líderes políticos y una justicia efectiva.
Este lamentable episodio ha reabierto el debate sobre la violencia política en Colombia y el papel de los menores en el crimen organizado, poniendo en evidencia la fragilidad de las garantías democráticas en un año preelectoral.
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