La inseguridad en Bogotá vuelve a llegar hasta los puentes peatonales de TransMilenio. Tal como ha ocurrido en otras ocasiones, este miércoles los usuarios del sistema tuvieron que pegar brincos y hacer de equilibristas para pasar por la estructura que conecta a la estación de Paloquemao, ubicada en la NQS.

Los pasajeros han tenido que enfrentar varios riesgos para llegar a la estación o salir de ella. Según reportó W Radio, el robo de láminas de los puentes peatonales volvió a perjudicar el tránsito de las personas, que quedaron represadas porque no todas se atrevieron a pasar sobre el hueco.

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Transmilenio: hurto de láminas afecta a pasajeros

En el video que compartió la emisora se puede observar a varias personas intentando hacer equilibrio y buscar el camino menos inseguro para poder atravesar el puente de la estación de Paloquemao.

El robo de las láminas dejó un hueco de grandes proporciones que sin duda alguna significa una trampa mortal para quienes pasan por el puente. De hecho, la ausencia de estos elementos ha ocasionado múltiples accidentes en anteriores oportunidades.

En la grabación se puede apreciar que una mujer que se valía de un bastón para caminar quedó represada en la estructura ante la imposibilidad de saltar o hacer equilibrio en lo que quedó de puente.

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El problema de los huecos no solo es físico, sino fiscal. Al ser de metal, inescrupulosos retiran las láminas para revenderlas en el mercado negro, donde son valiosas por su peso y solidez. 

De acuerdo con la Alcaldía de Bogotá, cada lámina cubre un metro cuadrado de puente y su reposición le cuesta a la ciudad 627.000 pesos. Y según el IDU, en 2021 tuvieron que ser intervenidos 30 puentes por cuenta de las láminas faltantes.

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