Las vueltas que da la vida (y la política) tienen a Barreto hoy en un importante cargo del gobierno de entraña uribista, pese a que hacia 2010 le preguntaba al expresidente Uribe, líder de la colectividad que llevó a Iván Duque al poder, cosas como: “¿Cuál es la demora con la declaración de renta? De pronto con eso basta…”.

Entre los trinos de Barreto, recogidos por la revista Semana, también llama la atención otro en el que compara por lo bajo a Uribe con el venezolano Hugo Chávez: “Chavez iba a entregar el país sin pobreza en el 2013, así como Uribe iba a entregar COL sin guerrilla en 2010. Política latinoamericana”.

Pero no solo eso. Barreto también se metió con uno de los personajes consentidos de Uribe, el exministro Andrés Felipe Arias, en un tuit en el que escribió: “Qué tal la cara de monaguillo que pone la rata de Andrés Felipe Arias cuando lo entrevistas? Descarado! ‘Falso positivo judicial’ dice él”.

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Otro personaje con el que Barreto comparó a Uribe fue con su más odiado sucesor: el entonces presidente Juan Manuel Santos. Recién había comenzado el gobierno de Santos, el hoy Superintendente de Industria y Comerció trinó en 2012: “‘Uribe es cosa del pasado’ @JuanManuelSantos para @CNN”.

En todo caso, y pese a sus feroces ataques contra el expresidente y hoy senador del Centro Democrático, el presidente Duque designó a Barreto como titular de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), el pasado sábado 15 de septiembre.

Para Duque, y así lo manifestó en Twitter, Barreto es una “persona preparada académicamente, de muchos valores y solvencia ética. Estoy seguro que con su juventud y competencia hará una gran gestión”.

Por supuesto, la andanada de críticas contra Barreto y Duque (por nombrarlo) ha sido constante. Pero hay un axioma que ha hecho mucha carrera en Colombia para explicar los constantes y acrobáticos cambios de muchos personajes: la política es dinámica.