En el comunicado, la cancillería señala que las declaraciones que dio el presidente Iván Duque estarían orientadas a “solapar su baja popularidad”.

“A todas luces, las obsesivas agresiones de Iván Duque sin duda obedecen a la dramática baja de popularidad de su gestión, reflejada en la publicación de recientes encuestas que evidencian el malestar del hermano pueblo colombiano ante los grises resultados de sus primeros 100 días de gobierno”, dice el boletín, que compartió esa entidad a través de Twitter.

La declaración de la discordia la dio el presidente Duque el pasado fin de semana en una entrevista con El Tiempo, en donde dejó claro que no está dispuesto a reestablecer los canales diplomáticos con el gobierno venezolano.

“El gobierno de mi antecesor no reconoció los últimos resultados electorales en Venezuela. Yo tampoco, como muchos otros países de la región. ¿Qué quiere decir eso? Que en enero, cuando entre el nuevo periodo del dictador con esa apariencia de formalidad, no vamos a hacer la pantomima de seguir manteniendo relaciones diplomáticas con un régimen que está violando la Resolución 1373 de Naciones Unidas, alojando terroristas en su territorio”, dijo Duque en el periódico.

Además, en medio de la entrevista, el Jefe de Estado lanzó un señalamiento contra su homólogo:

“No vamos a premiar a un criminal de lesa humanidad que sistemáticamente está lacerando a su pueblo. Por ahora con Venezuela hay una relación consular y de negocios, como ocurre en este tipo de circunstancias”.

Esta afirmación fue interpretada como un intento por “dar lecciones de democracia”, y por eso en el comunicado la cancillería apela a los “problemas internos” de Colombia para lanzar su arremetida contra Duque.

“Resulta absolutamente risible que el Presidente del país líder mundial en narcotráfico, narcopolítica, paramilitarismo, parapolítica, secuestros, falsos positivos, producción y procesamiento de drogas y en violencia selectiva contra líderes sociales, pretenda dar lecciones de democracia y gobernabilidad institucional a los venezolanos y al mundo”, dice el texto.

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En su afán por responder a Duque con el argumento de los “problemas internos” del país, al régimen venezolano se olvidó que en su territorio la situación es aún más grave y que miles de migrantes que huyen por la crisis buscan refugio en Colombia.

También, si de hablar de narcotráfico se trata, hay que recordar que familiares de Nicolás Maduro, específicamente dos sobrinos de su esposa (Cilia Flores), fueron detenidos en noviembre de 2015 cuando trataban de ingresar a Estados Unidos con 800 kilos de cocaína.

Tampoco hay que dejar por fuera de la lista la hiperinflación en Venezuela que parece no tener freno, la represión de las protestas, las represalias contra medios de comunicación, las confrontaciones con líderes de la oposición y la baja popularidad de Maduro, que a diferencia de Duque no fue designado por voto popular y el pueblo y varios países de la región desconocieron su elección.