La medida busca mejorar la seguridad dentro del sistema, o al menos la percepción de la misma, pues el ponente cree que los delincuentes pensarán dos veces antes de cometer un hurto si ven a integrantes del Ejército, la Armada o la Fuerza Aérea en los articulados.

Lo malo del proyecto es que al parecer no fue socializado directamente con Transmilenio y con la Alcaldía Mayor de Bogotá, pues Peñalosa señaló que se debe realizar un estudio minucioso para verificar su sostenibilidad financiera:

“Por supuesto nosotros quisiéramos poder implementar esto, pero tenemos que ver en la práctica no solamente el costo, sino que se pueda lograr un control donde efectivamente los empleados del sistema permitan que ingresen gratis los funcionarios de las Fuerzas Militares, pero no algún amigo del barrio”.

El mandatario de la capital también señaló que la medida tendría que ser avalada por la Alcaldía antes de entrar en vigencia y recordó que este tipo de iniciativas deberían ir acompañadas de una propuesta para hacerla sostenible:

“Nosotros estamos agradecidos infinitamente con nuestros policías y miembros de las Fuerzas Militares, pero tenemos que medir el alcance de este nuevo proyecto. Ojalá hubiera en la Constitución una norma que obligara que cada propuesta que de alguna manera genere gasto, deba ir acompañada de una propuesta de qué impuesto subir o qué otro gasto recortar”.

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Además, señaló que se tiene que ser muy cuidadoso con este nuevo proyecto, ya que pueden ocurrir otros abusos con el sistema.

“Está completamente prohibido que funcionarios, magistrados, generales de la República o ministros utilicen los carriles exclusivos de TransMilenio. Los conductores de las ambulancias muchas veces abusan, ninguna ambulancia puede ingresar a los carriles de TransMilenio sin que tenga una emergencia y una autorización previa de la central”, dijo.

Peñalosa recalcó que el sistema “asume ese tipo de gastos que aparentemente no cuestan nada, pero que van generando unos costos y además un desorden que después es difícil de controlar”; además de encontrar la manera de que sea “utilizado realmente por los beneficiados”.