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El reciente informe emitido por la Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC) pone en evidencia una preocupante tendencia en el incremento de personas lesionadas por el uso de pólvora durante las tradicionales noches de velitas en el departamento. De acuerdo con la información recabada mediante la vigilancia intensificada con corte al 9 de diciembre, se identificaron 13 casos de personas quemadas, lo que equivale a un aumento del 113 % con respecto al mismo periodo del año anterior. Esta cifra, proporcionada por la DTSC, alerta sobre la persistencia de riesgos asociados con la manipulación de artefactos pirotécnicos durante celebraciones populares.
Jorge Rubio Jiménez, subdirector de Salud Pública de la DTSC, detalló que siete de estos incidentes ocurrieron específicamente entre el 7 y el 8 de diciembre, fechas que corresponden a las festividades de las velitas. Posteriormente, el martes 9 de diciembre, se notificaron dos casos adicionales, ambos involucrando menores de edad. Uno de estos corresponde a un joven de 16 años en Manizales, quien sufrió quemaduras de primer grado por un volador y requirió hospitalización. El segundo caso afecta a un niño de 10 años en Belalcázar, quien presentó quemaduras leves en los dedos de la mano, situación que permitió un manejo ambulatorio.
A los nueve casos contabilizados hasta esa fecha, se suman cuatro reportes previos ocurridos antes del 7 de diciembre, alcanzando así el total de trece personas afectadas en el departamento, según confirmó la DTSC y citó el medio La Patria. De estas víctimas, cuatro permanecen hospitalizadas, destacándose entre los afectados la vulnerabilidad de la población infantil, aunque, por ahora, las autoridades no han registrado víctimas fatales relacionadas con estos accidentes.
En respuesta a esta situación, Rubio Jiménez extendió un llamado enfático a la comunidad, particularmente a padres y cuidadores, para que tomen medidas preventivas y eviten que los menores de edad tengan acceso a la pólvora. El llamado incluye también una advertencia para que los adultos actúen con responsabilidad y se abstengan de manipular materiales pirotécnicos, especialmente si se encuentran bajo la influencia del alcohol.
Estas cifras revelan el impacto social y sanitario que puede acarrear el uso irresponsable de la pólvora durante festividades. El escenario expuesto por la DTSC promueve la reflexión sobre las implicaciones en salud pública que, año a año, deben afrontar las familias y las instituciones de salud regionales en Caldas. La reiteración en la advertencia por parte de las autoridades resalta la importancia de la prevención y sensibilización como medida indispensable para reducir este tipo de accidentes, especialmente entre niños y adolescentes.
¿Cuáles son las consecuencias a largo plazo para quienes sufren quemaduras por pólvora en la infancia?
En el marco del reporte entregado por la Dirección Territorial de Salud de Caldas, emergen interrogantes sobre las secuelas que pueden enfrentar los niños afectados por quemaduras causadas por artefactos pirotécnicos. Las quemaduras, en especial cuando comprometen a menores, no solo generan dolor e incapacidad temporal, sino que a menudo dejan cicatrices físicas y emocionales que perduran más allá de la recuperación inicial.
La preocupación por las consecuencias a largo plazo va más allá del reporte estadístico inmediato, ya que implica considerar procesos de rehabilitación, implicaciones en el desarrollo físico y afectaciones psicológicas. Este contexto subraya la importancia de adoptar medidas preventivas efectivas para evitar que el uso de pólvora continúe representando riesgos para la infancia y la salud pública.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
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