El profesor se molestó porque los alumnos de cuarto de primaria estaban distraídos jugando en el computador de clase, en el salón de informática.

El educador tomó por el cuello a los dos estudiantes, los sacó de la silla, los tiró al suelo junto con sus maletas, les gritó y después los envió a la rectoría, indicó la Personería de Bogotá en un comunicado. 

La falta fue calificada como grave a título de dolo; es decir, que, pese a conocer el docente el carácter dañino de su conducta, la realizó en forma deliberada”, indicó el ente de control.

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El docente fue suspendido por “faltarle al respeto a sus alumnos con el maltrato físico y verbal al que los sometió, conducta inadecuada en la relación que se espera entre profesor y alumno”, afirmó la Personería.

Sin embargo, podrá apelar la decisión, que será resuelta por la Personera de Bogotá en segunda instancia.