La parranda tenía lugar en el barrio de invasión La Victoria, a donde llegaron los uniformados, pues se estaban violando todos los protocolos de bioseguridad para evitar la propagación de la COVID-19, informó Caracol Radio.
Rubén Darío Villabona, alcalde de la población, confirmó en la emisora que fueron 5 los policías que resultaron heridos con machetes, piedras y palos. Agregó que todos están siendo atendidos en un centro asistencial de Sabana de Torres.
“Recibimos la llamada de la comunidad sobre la fiesta, se desplaza la Policía Nacional y se presentó una asonada en contra de la Fuerza Pública”.
Después del hecho violento se adelantará un consejo de seguridad para tomar medidas que ayuden a hacer cumplir el confinamiento.
De momento, confirmó Caracol Radio, se dio la orden de militarizar el corregimiento, además de aumentar los puestos de control.
De otro lado Vanguardia destacó que el episodio ocurrió sobre las 11:45 de la noche.
El coronel Carlos Julio Cabrera, comandante de la Policía de Santander, le dijo al medio regional que “los policías se replegaron a la estación. La gente llegó enardecida a las instalaciones y afectaron a los otros uniformados que estaban en el sitio”.
Además, señaló que “hubo necesidad de usar la fuerza y gases lacrimógenos para contener a la turba”.
También hubo daños materiales a un vehículo y a varias motocicletas, destacó el rotativo, que agregó que se lograron 2 capturas.
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