Por medio de una carta, fechada este 18 de febrero y dirigida a los miembros de la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas, la defensa de alias ‘Otoniel’ pidió que el capo pueda acogerse a la JEP.
La pretensión, según el documento es que Úsuga David entre a esa jurisdicción “en calidad de tercero colaborador de las Fuerzas Armadas y promotor y financiador de grupos paramilitares”.
De hecho, el documento habla de información que ‘Otoniel’ tendría sobre miembros de las Fuerzas Militares y el antiguo DAS.
Si bien el narcotraficante ha estado en la JEP como testigo, no ha sido acogido por la justicia transicional, a la que estaría buscando llegar para tener varios beneficios y, de paso, evadir su extradición a Estados Unidos.
En el documento radicado por los abogados de ‘Otoniel’, piden que sea aceptado al señalar su influencia en los grupos armados, vital para comprender el conflicto en la región del Urabá.
Y es que, recuerda la defensa del capo, Úsuga estuvo en las autodefensas 1995 hasta 2006. Además, argumenta que su solicitud de acogimiento a la JEP se daría como tercero civil.
“Específicamente en las conductas de colaboración en acciones ilegales de graves violaciones de los derechos humanos por parte del Ejército y del DAS, así como en la promoción, planeación, organización y financiación de grupos paramilitares sucesores de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia entre 2006 y 2008”.
Destacan que Úsuga David ha participado directamente del conflicto armado desde 1986, cuando ingresó como miliciano a las Farc, después como guerriłlero del EPL —entre los años 1988 Y 1991—. Posteriormente, como miembro de las disidencias del EPL ‘Bernardo Franco’ —entre los años 1992 y 1995— y a las Autodefensas Unidas de Córdoba.
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