Caracol Radio informa que la mujer entró desprevenida a la cocina, en la mañana de este jueves, cuando se llevó la sorpresa de ver al gigantesco reptil, lo que la llevó a llamar a la línea de atención 123.
Un poco después, el estado de salud del animal fue evaluado por el Establecimiento Público Ambiental, EPA, antes de ser devuelta a su hábitat natural, en una reserva ecológica, destaca la frecuencia radial.
El medio señala que la policía ha intensificado la búsqueda y detección de animales silvestres para evitar su comercialización ilegal, especialmente en época de cuarentena, en la que algunos animales salvajes sienten más libertad de deambular por las calles ante la ausencia de personas.
Las boas constrictor son serpientes no venenosas que se caracterizan por envolver a sus presas para inmovilizarlas y luego tragarlas.
Una boa adulta puede llegar a medir 5 metros de largo, por lo que hace pensar que la hallada en la cocina de la vivienda cartagenera es una adulta joven.
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