Los hechos se presentaron el pasado martes 20 de octubre cerca de las 10:00 de la noche cuando, según Caracol Radio, Diego Díaz regresaba de su trabajo en bicicleta por este sector y fue embestido por siete hombres que estaban ocultos entre los árboles.
La madre del joven, de 25 años, contó en la emisora que a su hijo lo tumbaron de la bicicleta, lo golpearon a patadas y le robaron su medio de transporte. Además, le esculcaron la maleta que llevaba, le sacaron la billetera y “hasta el tapabocas fue robado”.
No satisfechos con el salvaje ataque, los ladrones, detalló la frecuencia, le rasgaron el pantalón con una navaja y le propinaron dos puñaladas que le comprometieron un pulmón y el corazón.
“Cuando mi hijo se dio cuenta, porque él sentía que caía líquido, vio que estaba lavado en sangre, salió a la vía y dos personas, una en moto y otra en un carro, pararon a ayudarlo y como pudieron lo llevaron a la clínica Santa María del Lago”, narró la mujer en la frecuencia.
La víctima de este nuevo hecho de inseguridad en Bogotá se debate entre la vida y la muerte en el hospital, y la emisora confirmó que ya fue sometido a una cirugía y que está con “ayuda mecánica para respirar”.
La familia de Diego Díaz hizo un llamado para que autoridades atrapen a los responsables y brinden mayor protección a los ciclistas, y el secretario de Seguridad, Hugo Acero, destacó en un debate en el Concejo el aumento de policías para labores de vigilancia.
La Alcaldía, por su parte, aseguró en un comunicado que desde finales de septiembre se pusieron en marcha estrategias “de prevención y control del hurto de bicicletas”, ya que este delito aumentó en medio de la reactivación económica.
Si bien el Distrito lanzó una campaña para que víctimas de hurto de bicicletas denuncien, lo cierto es que una mayoría de estos reportes terminan archivados a nivel nacional, y un ejemplo de ello es que de las 105.414 denuncias que se formularon entre marzo y agosto de 2020, 64.081 fueron archivadas por diferentes motivos.
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