Andrés Sepúlveda, único condenado en el caso de interceptaciones ilegales y seguimientos a negociadores de paz con las Farc, se accidentó el viernes 24 de enero en la mañana en el gimnasio de La Picota, y aunque las heridas le provocaron una convulsión, no fue atendido de inmediato porque el médico de la cárcel no estaba, y se tardó 3 horas en llegar, informó El Espectador.

Según pudo establecer el diario con familiares del ‘hacker’, en el momento en que fue trasladado al centro médico no le practicaron los procedimientos mínimos necesarios para descartar daño cerebral y desde la mañana de este sábado está metido en su celda, con las heridas abiertas y sin medicamentos.

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Sin embargo, el Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec) manifestó que Sepúlveda no está encerrado en su celda, sino que se encuentra en la unidad sanitaria de la cárcel bajo observación por la gravedad de sus heridas, indicó Blu Radio.

“Como el golpe fue en la cabeza, fue nuevamente atendido por los médicos de La Picota y se encuentra en observación”, explicó la autoridad carcelaria según la emisora.