Escrito por:  Redacción Nación
Ago 13, 2023 - 10:45 am

Después de que se conociera la multa que le impuso la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) al Grupo Aval y a Corficolombiana, debido a acciones irregulares que eran investigadas en el marco del caso Odebrecht, el presidente Gustavo Petro enfiló sus baterías contra el conglomerado financiero, contra la anterior Superintendencia de Industria y Comercio, y contra la Fiscalía General de la Nación.

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“Desde la superintendencia de industria y comercio hasta la fiscalía se dedicaron a dejar sin justicia el caso Odebrecht por defender los intereses particulares del grupo Aval. Hasta la multa les quitaron”, escribió el presiente el viernes pasado en su cuenta de X (antes Twitter), y después planteó una demagógica pregunta: “¿Es más poderoso el dinero que la justicia?”.

Este domingo, de nuevo, el mandatario arremetió contra el Grupo Aval, pero además señaló al exfiscal Néstor Humberto Martínez y les pidió a los particos políticos que hayan recibido dinero de ese conglomerado financiero que lo devuelvan. Eso lo plantea desde su perspectiva de lucha contra la corrupción.

En un trino tan extenso como descuidado (esa es su marca), el presiente Petro escribió que “la red de corrupción en la ruta del sol [SIC] tiene un agravante: Un Fiscal General de la Nación fué [SIC] el abogado de la red previamente y recibió una comisión de éxito por una decisión oficial que se logró a través de un soborno a funcionario público de varios millones de dólares tal como lo denuncié en mi debate en el senado de la República”.

Petro califica la relación entre Néstor Humberto Martínez y el Grupo Aval como “incestuosa”, y sostiene que eso “impidió una [SIC] juicio transparente en el caso y el descubrimiento de los sobornados que hoy por hoy son altos dirigentes políticos”.

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A renglón seguido, aprovecha para relacionar el hecho con la terna que presentó para escoger el nuevo fiscal general de la nación. “Esta impunidad pesa sobre la presión que hoy se ejerce para impedir que la actual Corte Suprema de Justicia designe nuevo Fiscal de la terna enviada por el presidente tal como ordena la Consitución [SIC] Nacional. Se ha intentado hasta impedir al presidente presentar la terna con este propósito sin pensar siquiera en la Constitución”.

Aprovecha asimismo este trino para responder él mismo la pregunta demagógica que había planteado la semana pasada (“¿Es más poderoso el dinero que la justicia?”): “Una Justicia poderosa, como propuse en mi campaña, es más importante que el dinero porque es la base de la Paz”.

Aseguró también que su gobierno “desea blindar de hechos de corrupción judicial la Fiscalía General de la Nación en el futuro”, y dio otras dos razones que, a su modo de ver, son “causa suficiente” para presentar una reforma a la justicia: la sentencia de la Corte Constitucional que ordena reformar la Procuraduría de acuerdo con la Convención Americana sobre los DD.HH. y el hecho que el grupo Aval “haya confesado ante la justicia extranjera estar incurso en la red de corrupción y sobornos a políticos y funcionarios del estado colombiano”.

En ese sentido, anunció que el Gobierno creará una comisión para la reforma judicial “compuesta por las personas que se hayan distinguido por su pulcritud en la administración de la justicia con el fin de redactar la reforma que se presentará al Congreso de la República”.

Finalmente, les pide a los partidos políticos “devolver los dineros donados por el grupo económico que ha confesado el otorgamiento de sobornos. Es importante que los partidos políticos examinen cuales [SIC] de sus altos dirigentes participaron tanto en los actos administrativos que ampliaron la ruta del Sol II como en la fiscalia [SIC] que los encubrió y tomen las medidas que la decencia determina”.

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