Pérez advirtió, según La F.m., que en la población de Remedios (Antioquia) “es donde más desertores hay”, y que de todos los excombatientes que salieron “hay 80 que siguen peleando por incumplimientos en el dinero”.

“Nosotros no podemos decir si es cierto o no, pero casi todos los que han abandonado las zonas dicen que el Gobierno no les estaba cumpliendo”, agregó Pérez, citado por la emisora.

Además de Remedios, la cadena radial apunta a que en Ituango, Dabeiba, Anorí y Vigía del Fuerte, “solo quedarían 663 de los 1.168 exguerrilleros de las Farc que se supone harían el tránsito a la vida civil” en ese departamento.

Es decir, según estas cuentas, 505 desmovilizados habrían desertado sin completar los trabajos de adaptación a la vida civil.

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En un comunicado que emitió la Gobernación de Antioquia, Pérez denuncia que de los más de 70 excombatientes que estaban instalados en el centro de normalización de El Gallo, en Córdoba, “solo se quedaron 6 personas”, y que los demás “se instalaron en una finca en el municipio de Mutatá”.

“Eso significa en la práctica que entonces Antioquia tiene un nuevo centro de normalización y por ello se le pedirá al gobierno nacional que tome decisiones al respecto, ya que las 6 personas que quedaron son vigiladas por 400 soldados y 120 policías”, dijo el gobernador Pérez.

El mandatario pidió al Gobierno tener en cuenta estos movimientos y no esperar hasta que ocurra algún incidente.