De dientes hacia afuera, los reclamos son legítimos. Hugo Ospina, uno de los abanderados en la lucha contra Uber, insistió este martes que la cuestión no es contra la tecnología, sino con que carros particulares presten el servicio.
Así lo dijo Ospina en La W, contestando al experto en movilidad Julián Moreno, quien sostuvo que se trata en realidad de un problema mal abordado: “Le exigimos al gobierno nacional que nos diga si compramos particulares o compramos taxis para prestar el servicio”, señaló el líder de los taxistas.
Para Moreno, los voceros, que deberían estar luchando por necesidades del gremio y mejorar sus condiciones laborales, en realidad “lo que están planteando es mantener un statu quo en el que el estado les garantiza un monopolio natural de que son los únicos que deben prestar el servicio”.
Según él, el tema debería enfrentarse como “una necesidad de flexibilizar las reglas del juego”, y acusó al gremio de no hacer “un mea culpa” acerca de temas que son los que en realidad han movido a los usuarios a las plataformas.
Para Ospina, la preferencia de las aplicaciones radica en los precios: “La gente se sube a un vehículo de esas plataformas porque están cobrando menos de la mitad. Abusan y roban al usuario, por eso necesitamos reglas claras”, señaló.
El líder de los taxistas también dijo que estas promueven modelos de negocio prohibidos por la regulación, e invitó a sus compañeros a desinstalar aplicaciones como Cabify e Easy Taxi. Este rechazo a las nuevas plataformas también llevó a que la intención de la alcaldía de Bogotá de regular tarifas con el uso de tabletas no prosperara.
Moreno, en cambio, insistió en que en realidad se debe al servicio, y puso como ejemplo a mujeres que se han sentido intimidadas al abordar taxis. Es por esto que subrayó que de la seguridad del servicio de taxis, y no solo en cuanto a robos y delitos, sino también confianza a la hora de establecer las tarifas y los cobros por el servicio, señalando que la negativa a adaptarse se extiende también a esto, que es uno de los temas más decisivos para los usuarios a la hora de escoger su servicio.
En conclusión, el tema se reduce a las garantías que presta uno y otro tipo de servicio, las cuales hasta el momento han tenido el respaldo de las aplicaciones y las empresas que tienen detrás, mientras que el servicio respaldado por la ley ha venido perdiendo credibilidad y ha preferido mantenerse como viene antes que reconocer que necesita transparencia.
Por si fuera poco, algunos taxistas denuncian que detrás del paro hay en realidad intereses políticos y electorales, además de que los que lo convocaron no representan a todo el gremio, recogió La FM: “El señor Manuel Gil y el señor Hugo Ospina en ningún momento representan los intereses del gremio y es claro que están a favor de intereses personales”, dijo uno de ellos.
“Todo el asunto se trata de un pulso político donde estas dos personas intentan mostrarse a pesar de ser falsos líderes”
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