El negocio de compra y venta de cobre más allá de ser una actividad comercial legal ha desatado una serie de problemas de seguridad en los barrios de Valledupar, donde se roban los cables de energía y los contadores para conseguir la remuneración económica del cobre que los artefactos llevan en su interior. 

El evento más reciente ha sido registrado la madrugada del miércoles en el edificio Novalito, ubicado en la carrera 6 # 13 – 73, al norte de la ciudad. 

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Los ocupantes amanecieron sin luz porque unos delincuentes robaron el cableado de energía que está afuera de la propiedad horizontal.

Heriberto Mendoza, habitante del edificio, contó que en otras oportunidades los delincuentes se han llevado el letrero y parte de los insumos de las escaleras para venderlos.

“Eso no se acaba hasta que no den con los reducidores porque se roban las cosas a cambio de algo de plata”, dijo Mendoza.

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El fin de este tipo de ladrones es conseguir el cobre a partir de cualquier objeto para recibir el pago que, a veces, es gastado en el consumo de estupefacientes.

LOS CONTADORES 

Sin embargo, el panorama es más complejo cuando el objetivo son los contadores de gas a los que también le hurtan el cobre y los dejan a la deriva sin importar el riesgo que eso significa para la comunidad. 

Los habitantes del barrio San Martín la semana pasada vivieron la problemática luego de que robaran en las viviendas 18 contadores de gas.

Alejandro Jiménez Mejía indicó que los habitantes tuvieron que pagar para resolver el servicio y cocinar, pese a no contar con muchos recursos económicos.

Otros de manera particular resolvieron la deficiencia del contador para recuperar su funcionalidad.

“Eso es un peligro porque queda la llave abierta y puede haber un incendio en la comunidad, en la ciudad, entonces esto le corresponde atenderlo al señor alcalde y al coronel de la Policía por la seguridad”, puntualizó Jiménez, uno de los afectados.

EL PILÓN trató de contactar al coronel Luis León Rodríguez para hablar sobre los operativos frente al tema, pero no atendió el llamado.

No obstante, en algunas oportunidades la Policía Nacional ha materializado la detención de sujetos con contadores hurtados.

El pasado 28 de septiembre, por ejemplo, reportaron la captura de Juan David Moya Zarate por el hurto de 8 contadores de gas localizados en la calle 11 con carrera 11 del barrio San Joaquín.

Los elementos los recuperaron y al joven la Fiscalía lo presentó ante un juez por el delito de hurto.

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