Los atentados que denuncia Ecopetrol ocurrieron en zona rural de las poblaciones de Teorama (Norte de Santander) y Arauquita (Arauca), y ocasionaron “cráteres” en la tubería, pero sin “rotura” del sistema.

Además, la compañía dice, en un comunicado, que durante un recorrido por estas zonas detectó “dos válvulas ilícitas” mediante las cuales le siguen robando combustible.

“Estas perforaciones ilegales, instaladas para el hurto de petróleo, causan un gran daño ambiental al contaminar ríos y terrenos del Catatumbo”, advierte Ecopetrol, en un comunicado.

Los atentados se registraron en zonas con fuerte presencia de guerrilleros del Eln, y según dijo el general Hugo López, de la Fuerza de Tarea Vulcano en Norte de Santander, el perímetro ya está asegurado.

“Se debe a estructuras del Eln que delinquen en el Catatumbo y buscan volar el tubo; para eso adelantamos acciones de seguridad”, explicó el oficial, declaración que recoge La F.m.

Contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas se presentaron 43 atentados, en 2016, y se identificaron y retiraron 33 válvulas ilícitas, en Norte de Santander, Boyacá, Arauca y Cesar, agrega la información.