Una de las condiciones que puso el presidente para ir al Cauca es “la vía de la confianza”, algo que “ya no se dió: ¿Por qué habrían de confiar los indígenas en un Estado que firma pactos y no los cumple?”, cuestiona Nicolás Rodríguez en El Espectador:

“El Cauca no queda simplemente ‘por allá’, lejos de Bogotá. El Cauca también es el centro. Es cuando menos extraño que el presidente le ponga condiciones a su presencia, como si pudiese escoger dónde gobernar y para quién no hacerlo”.

El columnista considera que la presencia de Duque en el Cauca sería un mensaje de soberanía, mientras que su ausencia pone en entredicho de qué lado de la ciudadanía está.

Ana Deida Secué, vocera de la Minga Indígena.

Artículo relacionado

Minga indígena del Cauca se reproducirá en distintos rincones del país

“¿Por qué esperar tanto?”

“¿Cómo creer en alguien que ni siquiera es capaz de ir al lugar del conflicto? ¿Que ni siquiera escucha las problemáticas sociales, económicas, culturales y ambientales de la región?”, pregunta por su parte María Fernanda Matus en El Heraldo, donde recuerda el largo tiempo que Iván Duque esperó para reunirse con los estudiantes.

Matus también resalta que el llamado de los indígenas es una urgencia y no un capricho, y lamenta que el presidente le preste más atención a Venezuela que a los problemas de su país.

“El diálogo es la salida más sensata. Presidente Duque, le recordamos que Colombia es el país que gobierna. Por favor, siéntese a dialogar”.

Así mismo, Édgar Papamija cree que “el pulso inútil que el presidente Duque le ha planteado a los indígenas, es debilidad de gobernante mal asesorado”, y sostiene en La República que el problema del mandatario se deriva de su “visión sesgada, presionado por los sectores que lo eligieron y que equivocadamente lo empujan a satisfacer sus caprichos o a desarrollar vindictas usando el retrovisor”.

Papamija concluye que Duque está gobernando para unos pocos, y expone como muestra reciente el cierre de puertas a los congresistas que se vivió esta semana, además del desdén por los indígenas.

“Nada justifica negar a los indígenas del Cauca el derecho a ser escuchados por el Presidente de los colombianos”.