Por tercer día consecutivo desde que se conoció que un vehículo, presuntamente, con dos ocupantes, cayó al abismo del Salto del Tequendama, las autoridades están en la búsqueda de sus cuerpos. Sin embargo, los esfuerzos han sido infructuosos y no han encontrado más que algunas libretas y dos celulares de Gerardo Segura, quien conducía el carro.

El accidente, que se presentó en la madrugada del 21 de septiembre, aún deja muchas dudas por resolver, la principal de ellas es el paradero de los cuerpos de quienes supuestamente iban en el Aveo rojo, modelo 2012, de placas RMW-778.

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Pese a que el vehículo, que se encontraba a una profundidad de 500 metros, fue recuperado en horas de la tarde del 21 de septiembre, las condiciones climáticas y del terreno han dificultado las operaciones de búsqueda, y eso ha retrasado el rescate de los cuerpos.

No obstante, las autoridades señalaron este viernes, reportó El Tiempo, que la búsqueda pasaría a ser de una sola persona: Gerardo Segura, el comerciante que conducía el carro.

Salto del Tequendama: se descartaría acompañante

Un punto que todavía sigue siendo un misterio es si Luisa Fernanda Méndez Cruz, a quien pertenece el carro, es quien acompañaba a Segura. O si por el contrario, el comerciante se movilizaba solo en el vehículo.

Los cuerpos de rescate informaron que el parabrisas del vehículo no estaba destruido, lo que descartaría la hipótesis que indica que quienes se encontraban en el vehículo habían salidos expulsados.

Además, no se encontraron rastros de sangre ni ningún vestigio de un cuerpo humano. Por tanto, las autoridades empiezan a valorar que el vehículo podría haber caído sin ninguna persona a bordo.

En cuanto a un posible suicidio, los familiares de Segura dijeron al rotativo que él no tenía depresión y que en los últimos días no dio señales de que la estuviera pasando mal.