Con un “dele, dele, dele, dele más” comienza el video publicado en Facebook que muestra a un furgón, a 200 metros de quien graba, que baja a una velocidad excesiva, mientras que el vehículo de atrás trata de alcanzarlo.

El conductor en problemas sobrepasa a 2 vehículos, por la izquierda y en aparente control de la situación, hasta que llega a una curva a la derecha, en la que casi se vuelca, pues el vehículo alcanza a levantarse de las ruedas del lado derecho.

Cuando las llantas vuelven a tocar el asfalto, el camión vira hacia el separador del lado izquierdo, ya sin control, y se sube al pasto, entre gritos de “Ahí cayó”, por parte del copiloto (quien está grabando) y de “Ay, lástima, pobrecito”, del asustado conductor del carro que viene detrás.

El artículo continúa abajo

El copiloto, muy calmado, insta a su compañero a seguir. “No, marica, uy, juepúchica, mano”, dice el conductor, mientras el otro le dice que el conductor del camión ya “lo controló” y que siga andando.

Los 2 hombres siguen rodando durante unos 150 metros más, hasta llegar a donde está el camión volcado, que finalmente quedó acostado sobre el separador, casi en contravía sobre el carril de subida, con la carga regada sobre el asfalto.

“Vamos a prestarles los primeros auxilios”, dice quien graba el video.

Cuando llegan a la cabina del camión, el conductor del vehículo pesado, aparentemente ileso, se encuentra de pie mirando su vehículo, mientras que una mujer joven con sangre en el rostro, también de pie, está en aparente ‘shock’, en silencio, por lo que acaba de suceder.

El copiloto del otro vehículo le dice que él pensó que se iba a recostar contra el barranco de la derecha, pero el conductor accidentado le hace ver que no fue posible realizar esa maniobra, que probablemente le habría evitado el volcamiento, y que por fortuna no chocó con vehículos que pudieran venir subiendo hacia Bogotá.

A juzgar por lo que dice el piloto del camión, había un niño en el vehículo, pero se le oye decir que está bien, y los testigos que llegaron al sitio hablan de pedir una ambulancia: “No, el man es un varón completo”, puntualiza el narrador, en reconocimiento, probablemente, a que logró mantenerse en la carretera durante el mayor tiempo posible.