En los últimos días, tanto el diario El Tiempo como El Espectador han dado nuevos detalles de la trágica muerte del empresario Roberto Franco Charry, asesinado por un sicario en el Parque de la 93, en el norte de Bogotá, el pasado miércoles 21 de febrero, justo cuando se había bajado de su vehículo blindado e iba entrando a la oficina.
(Vea también: Empresario que asesinaron en Parque de la 93 tenía pleito con su exesposa; hay denuncias)
Precisamente, en Caracol Ahora entrevistaron a la periodista Valentina Parada de El Espectador que ha hecho toda la investigación, quien contó más detalles de una de las líneas de investigación que maneja la Fiscalía y que apunta a los presuntos autores intelectuales del crimen.
El citado impreso indicó que Franco Charry estaba investigando un pleito legal de la empresa El Arrozal y Cía., cuyos socios se estaban peleando por la herencia de la compañía, ya que la mayoría son hermanos y llevan cerca de 3 años en una disputa que ha conllevado hasta amenazas de muerte entre ellos.
Franco Charry, muy cercano al representante legal de la empresa, estaba haciendo un servicio particular sobre una auditoria para revisar algunas irregularidades como desfalcos hasta por 300 millones de pesos, de acuerdo con el periódico. En esa línea entran varias figuras y se ha conocido que el día de su muerte tenía previsto un encuentro con otro de los socios, que es el único ajeno a la familia y al que supuestamente le iba a entregar unos documentos claves, según el rotativo. Esa cita era con Pedro Bastidas, un empresario pastuso.
Sin embargo, lo más escabroso que reveló la comunicadora del citado diario es el diálogo de la conversación telefónica que sostenía Franco Charry en el momento en que fue ultimado por el sicario. En las imágenes divulgadas en redes sociales se alcanza a ver que el empresario logra mantenerse en pie algunos segundos, ya con disparos en su cuerpo y hablando por celular, de acuerdo con el citado portal.
“Me dispararon, ven pronto”, fueron las últimas palabras del auditor asesinado a presuntamente un socio de la compañía El Arrozal y Cía, con quien tenía una de las dos citas programadas para ese miércoles 21 de febrero en el Parque de la 93, día en el que murió, según el medio de comunicación.
Por ahora, la Fiscalía ha recogido todos estos detalles y la persona con la que iba hablando por celular Franco Charry es crucial para la investigación, por lo que no se ha revelado su identidad, aunque se sabe que estuvo en la clínica El Country, donde también llegaron otros 3 socios más de la mencionada empresa.
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