Como Johana Guzmán fue identificada una mujer de 39 años que murió dentro de un improvisado centro médico en Bogotá cuando se estaba haciendo una cirugía estética. La paciente viajó desde Estados Unidos hasta la capital de la República por una recomendación, según informó El Tiempo.
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Luego del procedimiento quirúrgico, la mujer terminó falleciendo y sus familiares indican que el equipo médico no le prestó la atención correspondiente y prácticamente la dejaron morir en el quirófano, que al parecer era bien rudimentario, según el rotativo.
La mujer acudió a la clínica Surgical Center, ubicada en el norte de la ciudad. Uno de sus familiares contó en RCN Radio detalles de qué fue lo que pasó en medio del procedimiento: “Johana presentó un paro cardiorrespiratorio en la sala de recuperación de la clínica después de 3 horas de haber salido de cirugía”.
Lo grave del caso es que Guzmán, cuando salió de la cirugía, manifestó que sentía dolor, sed, mucho calor y la dejaron desgonzada en una silla reclinable en la sala de recuperación, lo que agrandó la molestia de sus familiares, ya que indicaron que no se le prestó la atención suficiente.
“Las enfermeras no prestaron ninguna atención, y el doctor nunca fue a revisar a su paciente en la sala de recuperación”, dijeron sus allegados en la emisora.
Los familiares de la paciente también denunciaron que el monitor de signos vitales no dio una alerta ante el mal estado de la mujer, pero cuando comenzaron a gritar al ver a Johana desmayada “se acercaron y notaron que ella no respondía”.
Debido a que el centro no contaba con ambulancia propia, Guzmán tuvo que esperar alrededor de 20 minutos para poder ser trasladada al Hospital Simón Bolívar, donde posteriormente falleció.
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